Le gustan los chicos más jóvenes que él, que le aporten la energía que empieza a faltarle. Miguel Bosé, según una fuente cercana al cantante, “no sabe estar solo. Quiere dar y recibir cariño. Pero pide a sus parejas, como hizo con Nacho Palau durante más de veinticinco años, que se mantengan siempre en un segundo plano”. Es muy celoso de su vida privada, y esconde sus amores y amoríos en el más puro secretismo.

Ahora, dicen, sale con un hombre de bastante menos edad que él. En la lujosa urbanización donde reside con sus dos hijos en las afueras de la capital mexicana, pasea con su nueva pareja y los niños. Allí no hay paparazzis ni miradas indiscretas, sus vecinos son grandes empresarios y personas acaudaladas que no se entrometen en la vida de los demás.

Miguel, según parece, lleva casi un año con su amigo más especial, y ni presume ni habla en público de su fiel acompañante de vida. Le conocen solamente los más íntimos, entre ellos su madre, Lucía Bosé, y sus hermanas, Paola y Lucía. Y buenos amigos suyos como Laura Sánchez y su pareja, David Ascanio, con los que coincidió en su casa de Somosaguas en su último viaje a Madrid, el pasado verano. Ni les vimos a los dos juntos ni tuvimos la menor constancia de la existencia de un nuevo amor del cantante.

Nacho Palau ha pasado definitivamente a la historia, y eso que algún medio de comunicación llegó a publicar hace meses que cabía la posibilidad de una reconciliación entre el cantante y el escultor. Nada más lejos de la realidad.

Los dos se verán las caras este año en el juzgado. Como recordarán nuestros lectores, Palau, que ahora vive con sus dos hijos en Valencia, reclama una compensación económica por los años vividos al lado de su ex pareja alejado de su profesión y dedicado en cuerpo y alma a Bosé, y pide que los cuatro niños sigan relacionándose como hermanos con los mismos derechos. Todos nacieron por gestación subrogada, Tadeo y Diego son hijos biológicos de Miguel, y Telmo e Ivo, de Nacho.

El pasado sábado, día 18, Paola Dominguín desvelaba que su hermano goza de buena salud, saliendo al paso de las noticias que aseguraron que sufre una extraña enfermedad que le afecta seriamente a las cuerdas vocales. Añadió que, aunque lo pasó muy mal cuando se separó de Nacho, ahora ha recuperado la serenidad. Y, por lo que se ve, también el amor.