La estrategia de la derecha

Nuevo capítulo

El pasado 22 de octubre, las librerías noruegas amanecieron con un título que promete remover los cimientos del Palacio Real de Oslo, Hvite striper, sorte fär (Rayas blancas, ovejas negras) firmado por los periodistas Øistein Monsen y Torgeir Pedersen Krokfjord, es mucho más que una crónica sobre drogas y excesos: es un retrato incómodo del hijo mayor de la princesa heredera, Marius Borg, y un desafío directo a la imagen de integridad de la monarquía escandinava.
La portada del libro no deja lugar a dudas sobre su contenido: una fotografía del joven tras unas líneas de polvo blanco. El subtítulo lo resume con crudeza -"un reportaje sobre la cocaína, las redes de narcotráfico y el hijo de la princesa heredera"- y lo cierto es que el relato va más allá del sensacionalismo. Según los autores, Marius, de 28 años, está acusado de cuatro violaciones, violencia doméstica y un total de 32 delitos, entre ellos tráfico de drogas, amenazas de muerte y agresiones a agentes de policía.
Pero el punto más explosivo del libros no es la lista de cargos, sino el papel que habría desempeñado su madre, la princesa Mette-Marit, en los primeros momentos del escándalo. Los periodistas aseguran que la esposa del príncipe Haakon fue alertada por la policía antes de la primera detención de su hijo, en agosto de 2024, tras un episodio de violencia contra su entonces pareja. De acuerdo con el relato, la princesa acudió al domicilio de Marius antes de que los agentes intervinieran y limpió el apartamento, intentando eliminar cualquier rastro comprometedor. Cuando las autoridades solicitaron el teléfono del acusado, este habría entregado un dispositivo roto y sin tarjeta SIM, en presencia de su madre.

Un mes más tarde, en septiembre, Marius fue detenido nuevamente. Esta vez, según los autores, la policía decidió no avisar a Mette-Marit "por el bien de la operación", temiendo que pudiera interferir de nuevo. El libro asegura que la princesa se enteró de la detención por un amigo de su hijo y que la noticia la habría "enfurecido".
Desde el Palacio Real, el silencio ha sido la norma. Solo se ha emitido un breve comunicado en el que se califica el libro de "inexacto y lleno de insinuaciones". basado en fuentes anónimas. La institución asegura haber recibido el manuscrito antes de su publicación "a petición propia", pero ha rechazado comentar los detalles. Los abogados de Marius, por su parte, lamentaron no haber sido informados y afirmaron estar analizando su contenido.
Mientras tanto, el juicio está previsto para el 3 de febrero en Oslo, y el joven, que se encuentra en tratamiento por sus adicciones, sigue en libertad. Marius no ostenta título nobiliario ni desempeña funciones oficiales, aunque su relación con la familia real siempre ha sido motivo de atención mediática.
Hijo del primer matrimonio de Mette-Marit con Morten Borg, un hombre con antecedentes por violencia y drogas, creció junto a su madre hasta que esta contrajo matrimonio con el príncipe Haakon en 2001. Desde entonces, la imagen de "madre moderna" y comprometida de Mette-Marit ha sido uno de los pilares de la monarquía noruega. Sin embargo, la publicación de Hvite striper, sorte får amenaza con resquebrajar ese relato y pone a prueba la solidez de una familia que siempre había logrado mantener sus sombras lejos del foco público.

La estrategia de la derecha