Entrevista

Jon Kortajarena: "Aquí tenemos mucho talento que se puede exportar"

Reconvertido en actor y embajador de Be Casa, el vasco repasa para LA RAZÓN una carrera que le ha valido, incluso, el reconocimiento de la República Italiana. España le debe una

Jon Kortajarena
Jon KortajarenaAgencia AP

Más de dos décadas después de iniciar su carrera en la moda y con los cuarenta años recién cumplidos, el modelo vasco Jon Kortajarena no para. En febrero recibió el reconocimiento de la República Italiana por su contribución a la moda, hace unas semanas fue unas de las estrellas de la Met Gala de Nueva York; acaba de protagonizar la portada de la versión checa de la revista Vogue y, esta semana, se presentaba como embajador de la firma Be Casa, unos apartamentos flexibles de los que el maniquí se ha convertido en imagen: "Me pareció algo muy interesante porque tras pasarme la vida viajando, me doy cuenta de las comodidades que esto puede aportar a los viajeros. Cuando eres joven vas cogiendo todo lo que te viene, pero con el tiempo te interesa hacer proyectos en los que crees, respaldados por la honestidad y la sinceridad, y esto es lo que he intentado hacer con Be Casa".

En la campaña que acaba de presentar con Be Casa habla de gestionar el tiempo, ¿cómo lo consigue?

Mis agentes hacen muy buen trabajo, intentan agruparme todo para que pueda tener tiempo de calidad; en mi vida personal hago un poco lo mismo, tengo lo que llamo un horario de oficina para responder mails, para crear proyectos, para ocuparme de las redes y ese tipo de cosas que considero trabajo, y cuando ese tiempo se pasa… hasta el día siguiente.

¿Y hay algo a lo que no pueda renunciar esté donde esté?

Los momentos de silencio, de meditación… y un olor. A veces puede ser incienso o unas velas, algo que me recuerde a mi hogar y que me dé esa sensación de estar en un sitio conocido, aunque no sea así.

¿Quizás en sus primeros tiempos como modelo habría agradecido tener siempre un lugar como este que nos presenta?

Por supuesto, siempre que llegas a un sitio nuevo hay una sensación como de frialdad. En muchos hoteles donde me he quedado lo primero que hacía era quitar los cuadros o la colcha de la cama, o los cojines… para que fuera un poco más yo.

Y ese tú… ¿ahora es más modelo o actor?

Soy muchas cosas, así que cada uno en la faceta en la que me conozca está bien, y yo voy desarrollándome en las disciplinas de modelo y actor que, aunque son totalmente diferentes, me gustan mucho y me llenan mucho.

¿Considera a Tom Ford un diseñador clave en su éxito?

Sin duda. Él fue el que me convirtió en un top model, pero también me enseñó mucho como persona. Siento que de él me he nutrido y me ha reeducado de alguna forma desde la admiración profunda que le tengo. Gracias a él soy quién soy hoy en día.

Cuarenta años dan para mucho, incluso para ser de otra época. ¿Tiene a veces esa sensación tras todos los cambios que ha habido en la moda en los últimos años?

Hay un antes y un después de la COVID-19. Creo ha habido un cambio muy potente en algunas cosas para bien, en algunas cosas para mal... pero me siento muy afortunado de pertenecer a las dos épocas.

Usted ha sido testigo y protagonista del creciente interés que hay en el mundo por los artistas españoles, ¿esto es real?

Me parece que ya era hora. Lo pensaba el otro día, antes éramos muy pocos los que destacábamos fuera por nuestro trabajo. Aquí tenemos mucho talento que se puede exportar. Pedro Almodóvar es el rey, con un lenguaje español convertido en universal con el que la gente conecta. Y ahora hay una generación con los Javis, Rosalía, Bad Gyal y un montón de gente que está haciendo algo muy español por el que se les aprecia en todo el mundo.

Acaba de recibir la Estrella de la República de Italia, ¿nadie es profeta en su tierra?

Me gustaría que se me reconociese también en mi país a un nivel cultural. Si hubiera destacado cómo lo he hecho en la moda, en otra disciplina, sí que se hubiera reconocido mucho más.

También destaca como portavoz medioambiental.

No voy de gurú, ni de ecologista perfecto, todo lo contrario, pero estoy intentado aprender y compartirlo con la gente porque creo que es algo que puede interesar. El cambio es un trabajo colectivo, que no entiende de clases sociales o fronteras. Sigo colaborando con Greenpeace y creo que pronto voy a tener nuevos proyectos. Además, con Reforest hemos creado el bosque Jon Kortajarena.