Tamara: “Estoy fenomenal, la verdad solo tiene un camino”

Era un asunto espinoso y doloroso del que Tamara había evitado pronunciarse públicamente… hasta ahora. La cantante sevillana, que este viernes celebra su 41º cumpleaños, ha roto su silencio tras ganar el juicio contra Neruk Manzano, su exmánager y durante años su mano derecha, quien le reclamaba 20.000 euros por un presunto delito de estafa y apropiación indebida. "Estoy fenomenal", declaró Tamara al programa "Fiesta", desde un resort en Matalascañas, donde disfrutaba del fin de semana en familia. "Hasta que el juez no se pronuncia, no puedes hablar del tema. Yo ahora sí puedo pronunciarme y es un caso que han desestimado", explicó, aliviada.

El proceso también incluía a Tina Baré, ex amiga íntima de la cantante y pareja de Manzano, lo que hacía aún más complejo el entramado emocional del caso. "Eran personas cercanas", recordó Tamara con cierta tristeza. La resolución judicial, que desestima las acusaciones, le permite cerrar un capítulo amargo. "No hay suficientes pruebas para que se pueda hacer un juicio sobre esas acusaciones o todo lo que ellos han dicho tanto de mí como de mi exmarido", explicó.

No ha sido fácil. La artista confesó sentirse herida por una denuncia inesperada, nacida desde el entorno más próximo. "Duele. Cuando trabajas con gente que viaja contigo, que trabaja para ti, aunque no sean familia, duele más", reconoció. Sin embargo, Tamara se muestra fuerte y firme: "Soy una mujer con mucha capacidad, y la verdad solo tiene un camino. Ellos pueden recurrir si quieren, pero lo tienen bastante complicado… y yo, sin miedo, para adelante, como mi último single 'Un paso más'".

En lo personal, Tamara también ha vivido meses intensos. A finales de 2023 iniciaba su separación de Daniel Roque, su marido durante dos décadas y padre de sus cuatro hijos: Daniela (18), Leandro (16), Valentina (12) y Héctor (9). Aunque al principio continuaron viviendo bajo el mismo techo, fue tras la primera comunión del pequeño -el pasado 24 de mayo- cuando cerraron definitivamente esa etapa.

Hoy, Tamara se muestra serena. Vive volcada en sus hijos, en su música y en sí misma. A las puertas de una nueva vuelta al sol, con heridas que empiezan a cicatrizar, la artista andaluza demuestra que, incluso en la tormenta, hay quienes aprenden a bailar bajo la lluvia.