La crónica de Amilibia: Las citas secretas de Feijóo y su tía monja

Feijóo ha tenido citas secretas con Abascal y Yolanda Díaz. Ahora espera verse con Ortuzar, del PNV, no sé si también en privado. Lo malo de las citas secretas, por muy a la gallega que se hagan, es que acaban siendo públicas, ítem más: se empieza así y se termina en las citas a ciegas. La política hace extraños líos de cama.

El líder del Partido Popular tiene muy en cuenta los consejos de su tía monja de 84 años, Lina Teresa Feijóo, una especie de Madre Teresa en versión gallega, según Graciano Palomo. Imagino que por la cita con Abascal no le dijo nada, pero verse a solas y en secreto con Díaz ya es otro cantar: la vice gallega es de mucho palpar al interlocutor, es expansiva en lo afectuoso, como los Presupuestos sanchistas. Le debió advertir, imagino, que esos encuentros, Albertito, hijo, mejor en privado, a ver qué va a decir la gente. Y luego, a confesarte, que ella es marxista.

Ay, las malas compañías, que decía Teodoro García-Page refiriéndose a su propio partido y a la penitencia que recibirá por ellas. Yolanda tuvo el detalle de invitar a la cena, en la que Alberto, quizá por consejo de su tía, evitó el marisco, que es afrodisíaco.

Y ya sabe: se empieza con los percebes y el albariño y se acaba cantando algo de las «Tanxugueiras». Feijóo aumenta la estructura nacional del Partido Popular: nuevos cargos para dar mejor respuesta a las preocupaciones de la ciudadanía, dicen. Hombre, precisamente el engorde de los partidos es algo que preocupa mucho al personal a dieta, pero si él necesita más consejeros y no le basta con sor Lina, lo entiendo. Yo tuve tres tías monjas y ya ven cómo he salido.