Burgos

El Consejo de Seguridad de Nuclear revisa la seguridad de la central nuclear de Garoña

El pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha revisado hoy la seguridad de la central nuclear de Garoña (Burgos), antes de pronunciarse sobre la prórroga de funcionamiento pedida por el titular de esta instalación energética. Según ha informado el CSN, la de hoy ha sido la segunda sesión dedicada a estudiar la solicitud de renovación de esa autorización, y se ha centrado en el informe correspondiente a la revisión periódica de la seguridad. El Reglamento de Instalaciones Nucleares y Radiactivas, ha observado la misma fuente, establece que la renovación de las autorizaciones de explotación se otorga después de superar una revisión periódica de la seguridad. Las "revisiones periódicas de seguridad"de las centrales nucleares persiguen comprobar el buen funcionamiento de los procesos que garantizan la seguridad de la instalación a lo largo de un determinado periodo de tiempo. Esa revisión supone la realización de una revisión "profunda"de los aspectos más relevantes para la seguridad de la central, entre los que se encuentran la revisión de la operación desde la última autorización, la situación radiológica de la planta, las modificaciones de la instalación y los cambios normativos. Tras la revisión periódica de la seguridad, está previsto que en siguientes sesiones el Consejo de Seguridad Nuclear estudie la documentación técnica correspondiente a la Normativa de Aplicación Condicionada, así como la gestión del envejecimiento y operación a largo plazo. El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se ha puesto como fecha límite el 5 de junio para emitir el informe definitivo sobre la continuidad de la central nuclear de Garoña. La empresa titular de la central nuclear (Nuclenor) presentó el 3 de julio de 2006 la solicitud de renovación del permiso de explotación. La regulación española obliga a las centrales nucleares a solicitar la renovación de las autorizaciones de explotación cada diez años, asociadas a la introducción de mejoras en su seguridad, y el CSN tiene además establecido un procedimiento especial para los casos en los que la solicitud de renovación supera el tiempo denominado "vida de diseño"(cuarenta años). En este procedimiento se recogen requisitos adicionales a los que se exigen a las solicitudes de renovación de las centrales que se encuentran dentro de su periodo de vida. Los requerimientos adicionales se centran sobre todo en una revisión del envejecimiento de las estructuras, los sistemas y los componentes. La central nuclear de Garoña es la primera que se somete a un exhaustivo proceso de evaluación para decidir una prórroga de su vida útil, que en principio acaba el próximo mes de julio, o su cierre definitivo. La central nuclear de Garoña está en funcionamiento desde 1970 y la autorización de explotación es válida hasta el próximo mes de julio, aunque la empresa titular de la misma, Nuclenor (participada al cincuenta por ciento por Endesa e Iberdrola), ha pedido una prórroga de ese permiso por un nuevo periodo de diez años. Si el informe del CSN es desfavorable y se desaconseja la prórroga, éste tendrá carácter vinculante para el Gobierno, que deberá ratificar su cierre; si es favorable a prolongar la vida útil, será el Consejo de Ministros el que tome la decisión definitiva. El de Garoña es el reactor nuclear más antiguo de los ocho actualmente operativos en España y el primero sobre el que el Ejecutivo deberá adoptar una decisión.