Berlín

La crisis del socialismo alemán obliga a anticipar los comicios en Hesse

La Razón
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El cuarto «land» más próspero de Alemania parece abocado a unos comicios anticipados tras el empate técnico de hace nueve meses. Los electores de la región de Fráncfort diseñaron entonces con sus papeletas un incómodo hemiciclo. La entrada parlamentaria de la neocomunista «Die Linke» (DL) invalidó las clásicas alianzas (conservadores más liberales; socialdemócratas más ecologistas), dejando al cristianodemócrata Roland Koch, presidente desde 1999, gobernando en funciones hasta que cayera del cielo una improbable coalición a tres bandas. Esta semana, estuvo a punto de suceder. La líder socialdemócrata, Andrea Ypsilanti, gestó un acuerdo con los Verdes para gobernar en minoría. Pero necesitaba la anuencia de los seis diputados de DL, a cuya colaboración había renunciado durante la campaña. Rota su promesa y conseguido el apoyo, el lunes, cuatro diputados del SPD anunciaban su negativa a votar junto a a los comunistas, aún a costa de perder el gobierno regional. El ridículo de Hesse apenas esconde la grieta interna de la socialdemocracia alemana, más dividida que nunca entre los partidarios de radicalizar el discurso y los herederos de la centrista «Tercera Vía» de Schröder.