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Testigo de la caída del muro

Entrevista a Karla Sachse, testigo directo de los acontecimientos que provocaron la caída del Muro el 9 de noviembre de 1989.

El próximo 9 de noviembre se cumplen 30 años de la caída del Muro de Berlín
Ciudadanos de la la República Federal de Alemania (RFA) y de la República Democrática Alemana (RDA) celebran la caída del muro de Berlín que separó Alemania en dos durante 30 añosEuropa PressEuropa Press

Karla Sachse es una artista que vivió la caída del Muro desde la parte del Este. Después de aquellos días históricos y efervescentes, participó en la democratización de la asociación de artistas de Berlín con conexiones con fuerzas de la oposición y los artistas rebeldes en Prenzlauer Berg, Weißensee y Pankow

¿Qué significó la caída del muro para los habitantes de Berín Este?

El muro hizo que los habitantes de Berlín Este nos convirtiéramos de inmediato en prisioneros de un sistema que imponía su dictadura en todos los ámbitos de la vida. Las autoridades de la República Democrática Alemana no dudaron en disparar o encarcelar a los osados que intentaron cruzarlo. El muro nos encerró en cuerpo y alma, sentíamos una enorme curiosidad por lo que pasaba al otro lado, pero sobre todo anhelábamos un cambio en nuestras vidas, libertad de expresión, un estado democrático y que se detuviese el espionaje a los ciudadanos por parte de los servicios secretos de la Stasi.

La construcción del Muro fue la herramienta que utilizó el Gobierno de la República Democrática Alemana (RDA) para contener el flujo masivo de los habitantes de Berlín Este hacia la zona occidental, bajo dominio de la República Federal Alemana (RFA). Desde el mismo momento del levantamiento del Muro, en verano de 1961, comenzó la lucha de la población para la reunificación del país.

¿Qué sentimientos tenía la población los meses previos a noviembre de 1989?

En los meses previos, el levantamiento de medidas de seguridad en las fronteras con Checoslovaquia provocó que muchos jóvenes huyeran del país, pero muchos otros se quedaron combatiendo de frente contra el sistema con acciones contundentes e imaginativas con el objetivo de desgastar y socavar la dictadura comunista. En el otoño de 1989 el miedo casi se había extinguido detrás de la energía que llevaba a la gente a tomar las calles y a protestar contra un gobierno que les asfixiaba.

¿Cuando se iniciaron las manifestaciones en Berlín, existía alguna esperanza de que el Muro cayera?

Nunca pensamos que las manifestaciones los días previos en Leizpig o Berlín nos conducirían a la caída del Muro y al derrumbamiento del régimen comunista de la RDA. La gente salía a las calles reclamando cambios radicales en las condiciones sociales y libertad de movimientos, más allá del telón de acero.

¿Cómo recuerda la noche del 9 de noviembre de 2019?

Al contrario de lo que muchos piensan el Muro no se cayó. Se abrío por un malentendido o por un lapsus de un portavoz del gobierno que anunció una rebaja inmediata en los requisitos para viajar a Alemana occidental. La población enfervorecida tomó las calles y nadie pudo detener que cruzaran la frontera. En ese momento el muro dejó de existir. El 9 de noviembre la presión que existía en el interior de la Alemania del Este se hizo visible para el resto del mundo. El deseo de la caída del muro, tantas veces anhelado, se había hecho realidad casi sin darnos cuenta. Poco a poco la ciudad entró en un estado de euforia que se prolongó durante varios días después

¿Qué significó las reunificación de Alemania después de tantos años de división?

Para muchos de nosotros Alemania no está reunificada del todo, para ello debería haberse redactado una nueva constitución que recogiese los anhelos de los alemanes del Este y del Oeste. Se intentó, pero la fuerza de los representantes del Este no fue lo suficientemente grande para que saliera adelante. El deseo de reunificación de los alemanes del este, sumado a las fuertes promesas que llegaban del oeste, provocó que se aceptara la reunificación sin saber que convertiría a la mayoría de los alemanes del Este en ciudadanos de segunda clase. Las consecuencias son visibles aún en la actualidad.

Karla Sachse
Karla SachselarazonLa Razón

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