Asia

Corea del Sur y el Coronavirus: Sabemos quién eres y adónde vas

El país asiático rastrea la posición de los ciudadanos para investigar la evolución de posibles rebrotes de la epidemia

Commuters amid new coronavirus infections in Seoul
Seoul (Korea, Republic Of), 11/05/2020.- Commuters wearing masks change trains in the morning rush hour at a subway station in Seoul, South Korea, 11 May 2020, amid concerns over the spread of COVID-19 in the wake of new infections at clubs in Seoul. (Corea del Sur, Seúl) EFE/EPA/YONHAP SOUTH KOREA OUTYONHAPAgencia EFE

Tienes 29 años. Sabemos que el finde pasado estuviste de discotecas en Itaewon (Seúl, Corea del Sur). Te gusta el whisky (dramatización) porque pediste lo mismo en los cinco clubs donde pagaste con tu tarjeta de crédito a lo largo de varias horas. Regresaste en taxi a casa, sabemos en cuál. Cuando un joven coreano dio positivo por Covid-19, lo epidemiólogos iniciaron su investigación. Como a él, buscaron nada menos que a otras 7.200 personas que asistieron a las mismas discotecas y que podrían estar contagiadas del virus y formar parte del nuevo brote de la epidemia que se ha detectado en el país asiático, que ha vuelto a cerrar sus bares, restaurantes y discotecas. Encontraron, después del rastreo, a 27 personas infectadas, la mayoría, sin síntomas. Cada una de ellas eran potencialmente focos de nuevos brotes. El alcalde de la ciudad, el muy querido entre sus conciudadanos Park Won-soon, afirmó en rueda de prensa que los casos se elevaban a 40 y que en todos ellos había un rasgo común: no llevaban las mascarillas. La ciudad, que había relajado las medidas de confinamiento, perdió la libertad ganada. Y el alcalde recordó que, en esta situación, unos pocos «pueden poner a la nación en riesgo».

Las autoridades coreanas tuvieron el cuidado de no revelar la identidad del paciente cero de su investigación, pero que quede claro que en Corea no se andan con bromas. Si hay que buscar a más de 7.000 personas que han pisado un garito, ya pueden apellidarse todas Park y Son, que las van a encontrar. Según el Gobierno del país, si el número de contagios se mantiene por debajo de 50 nuevos enfermos al día, hay más de un 95 por cien de probabilidades de averiguar cuál o, al menos, dónde, está el foco. Si los contagios se desbocan, esa tarea es imposible porque el rastro crece a ritmo geométrico. Este no es el espacio de un estupendo análisis acerca de libertad y privacidad versus seguridad, pero más nos vale ser conscientes de los riesgos que corremos. Por otro lado, es llamativo que se abran las discotecas un fin de semana y todo lo conseguido se ponga en peligro. Sin embargo, más de 30 millones de coreanos salieron a votar el 15 de abril y no se detectó ningún pico de contagios. Claro: votar, sí: discotecas, no. ¿Pero, por qué todo lo que nos gusta es ilegal o causa el mal?

La robótica y la informática nos estarán vigilando, seguirán nuestros pasos. ¿Podríamos tener un pasaporte biológico? ¿Rastrearán nuestra ubicación las fuerzas de seguridad, los ayuntamientos, el médico de cabecera? En una empresa coreana detectaron un un caso de Covid-19. Enviaron 16.628 mensajes de texto a personas que habían permanecido más de cinco minutos en el exterior del edificio usando la ubicación de sus móviles. Hoy siguen buscando a otras dos mil personas relacionadas con las discotecas y los familiares y amigos de los nuevos contagiados han recibido una visita de unos señores con un traje de plástico para recoger muestras. En Corea han muerto 256 personas. Han tenido 10.909 contagios. Saquen sus conclusiones.