Coronavirus

El coronavirus se extiende imparable por Latinoamérica

Los países endurecen las normas sin éxito ante el riesgo de colapso

Autoridades de Brasil inspeccionan frontera con Colombia por coronavirus
Detalle de un monumento al que le fue colocado tapabocas en la entrada del comando fronterizo Solimo, mientras soldados del Ejército brasileño junto con la Policía Federal, la Fuerza Nacional y la vigilancia de la salud, realizan controles en la frontera entre las ciudades de Tabatinga (Brasil) y Leticia (Colombia).Joédson AlvesEFE

Mientras que en Europa siguen abriendo comercios y la situación se normaliza, América se ha convertido en epicentro de la pandemia. De norte a Sur. El país más desbordado es Brasil donde los casos positivos por el nuevo coronavirus SARS-COV-2 superaron ayer el millón. En total, ya se habla de 1.009.699 contagios, mientras que las muertes por COVID-19, ascienden a 48.427. Se trata por tanto, del segundo país con más casos detrás de EEUU.

El boletín oficial publicado cada día por el Ministerio de Salud del Estado Federal brasileño ha sido centro de numerosas críticas en las últimas semanas, debido a la inconsistencia de sus reportes. Más allá de esta crítica puntual, numerosos especialistas coinciden que de cualquier manera los contagios confirmados en Brasil muestran un número inferior al real, ya que el país no realiza suficientes testeos por coronavirus.

Brasil está testeando brutalmente menos de lo que debería. En la mejor hipótesis, 20 veces menos de lo considerado adecuado”, indica el profesor del Instituto de Biociencias de la Universidad de San Pablo, Daniel Lahr. Y mientras un presidente Jair Bolsonaro que continua paseándose en carroza sin mascarilla, se niega a parar la economía, destituye ministros de salud y minimiza los efectos de la pandemia.

Por su parte Chile superó las 4.000 muertes por coronavirus y los contagios confirmados llegaron a más de 230 mil, según el último balance ofrecido por el Ministerio de Salud, que arrojó el aumento de fallecidos más alta en lo que va de la pandemia. Las autoridades consignaron otras 252 muertes.

El jueves, Chile endureció las sanciones para quienes no respeten la cuarentena -con penas de hasta cinco años de cárcel-, en un intento desesperado por contener el avance de los contagios. A un mes de la imposición de la cuarentena general en Santiago, no se ha logrado disminuir la movilidad en esta ciudad, sobre todo en los sectores más poblados y más vulnerables de una capital donde viven siete de los 18 habitantes del país. Al presidente Sebastián Piñera también se le achaca haber actuado demasiado tarde durante la primera fase, aunque ahora promueva “mano dura” entre los chilenos.

En Perú las cifras siguen marcando récords con 7461 fallecidos y 244388 casos positivos. Es el tercer país en el continente más afectado y el cuarto del mundo. Incluso se está acabando el oxígeno –las bombonas-, el sistema de salud está a borde del colapso y la ollas populares para dar de comer a la gente más vulnerable, volvieron a las calles y refugios.

Por último en Argentina un país con menos decesos, pero que desde el principio comando las medidas más duras, debate si volver a la fase uno después de un repunte de casos. Con 37.510 contagiados y casi 1000 fallecidos el presidente Alberto Fernández dijo: “No vaya a ser que porque todos nos relajamos y sentimos que nadie cercano se enfermó, llegó la hora de salir a correr, de salir a tomar una cerveza, de salir a ver vidrieras, y por eso todo el esfuerzo se vuelva inútil”.