Corea del Norte

El tigre disciplinario de Kim Jong Un, “número dos” en Pyonyang

El dictador norcoreano baraja dar más poderes a Jo Yong Won, uno de los hombres fuertes del régimen que se ha convertido en su gran apoyo a raíz de sus problemas de salud

Kim Jong Un en el centro de la imagen sin mascarilla atiende un espectáculo junto a su mujer, también sin mascarilla, el pasado mes de mayo
Kim Jong Un en el centro de la imagen sin mascarilla atiende un espectáculo junto a su mujer, también sin mascarilla, el pasado mes de mayoDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

El régimen de la familia Kim en Corea del Norte juega sus cartas con extrema discreción, mientras el mundo observa cómo el partido gobernante ha sufrido importantes cambios en los últimos meses. Los recientes acontecimientos que han azotado a Pyonyang, han empujado al líder norcoreano Kim Jong Un ante la posibilidad de nombrar una especie de Secretario Ejecutivo, que se presume que podría ser Jo Yong Won uno de los hombres más poderosos del gobierno de Corea del Norte, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap.

Todavía no hay consenso, y los que juegan a las adivinanzas siguen sosteniendo que quien sea nombrado para ser el número dos del partido, no tendría por qué ser de la línea de sangre dinástica, sino que podría ser una persona que no pertenezca a la realeza, como Jo, que ha dejado su huella como el tigre disciplinario de Kim.

Mientras permanecen los rumores que consideran a Kim incapaz de dirigir la nación por problemas de salud, o incluso muerto, el Gran Líder vuelve a estar en el candelero después de 12 meses cuanto menos complicados. Entre la pandemia de Covid-19 (si bien oficialmente el virus nunca habría entrado), los consiguientes problemas económicos derivados de la emergencia sanitaria mundial y las continuas tensiones con Estados Unidos, Kim se ha visto obligado a cerrar filas para dar una nueva impronta política.

Este nuevo puesto supuestamente se creó el pasado mes de enero en pleno Octavo Congreso del Partido. En esa reunión celebrada con toda solemnidad y estrictamente a puerta cerrada, Kim consolidó su poder al recibir el título de Secretario General del Partido, la columna vertebral del régimen norcoreano.

“La sombra de Kim”

Esta nueva personalidad, ocuparía en realidad el segundo puesto político más importante de Corea del Norte, y aparentemente este nuevo paso sería necesario para ayudar a Kim en la gestión de los asuntos del partido. La “sombra de Kim” podrá presidir las reuniones clave en nombre del líder, un privilegio que antes sólo estaba destinado a cinco miembros permanentes del politburó del partido (incluido el propio Kim).

Kim Jong Un ha ejercido un poder casi absoluto en el sistema dinástico de Corea del Norte desde que asumió el poder tras la muerte de su padre en 2011.

Entonces, ¿quién es esta supuesta misteriosa persona que asumirá este rol? Sería Jo Yong Won, de 63 años, estrecho colaborador de Kim y actual miembro del Politburó.

El nuevo nombramiento, daría a la sombra del dictador un aura de autoridad adicional. Según informes del diario “Asia Times”, en el último período Jo ha desempeñado el papel de tigre disciplinario del Gran Líder. ¿Qué significa esto? Se dice que Jo Yong Won ha ayudado a Kim Jong Un a mantenerse alejado de sus supuestos problemas de salud y, gracias a su nuevo cargo, seguiría haciéndolo ahora con más urgencia y dedicación.

Expertos aseguran que es probable que Jo Yong Wong haya sido elegido para apoyar al presidente a la espera de que los hijos del líder, que aún son jóvenes, crezcan para que un día uno de ellos pueda finalmente suceder a su padre. Es imposible imaginar que alguien sin la sangre real de la dinastía Kim pueda ocupar el cargo más alto del país.

La “hermanísima” también se postula

El ex ministro de Unificación surcoreano Lee Jong-Seok, por su parte, ha apuntado que es probable que el nuevo cargo siga vacante pero que podría ser ocupado de forma urgente, y ha apuntado a Kim Yo Jong, hermana de Kim Jong Un, como la persona más idónea para ocupar el puesto en ese caso. Según Lee, Kim probablemente asumiría como sucesora temporal hasta el momento en que el poder pudiera ser transferido al hijo de Kim Jong Un, citando la naturaleza dinástica del régimen norcoreano.

Sin embargo, otros ven a la hermana del dirigente como una candidata improbable, dado que fue apartada del Politburó durante el reciente Congreso del Partido, si bien es probable que aún conserve una gran influencia dentro del sistema político norcoreano dado su acceso al mandatario.