Pánico

La otra pandemia en Nueva York: una enfermedad relaciona con orina de rata

Se ha reportado la primera muerte y la ciudad entra en pánico por la alta posibilidad de transmisión y contagio de esta nueva patología

Los investigadores introdujeron 352 ratas canguro con cuatro gatos domésticos machos esterilizados para entrenarlas
Los investigadores introdujeron 352 ratas canguro con cuatro gatos domésticos machos esterilizados para entrenarlaslarazon

Al menos quince casos se han diagnosticado de una extraña enfermedad que se ha detectado en Nueva York y que, según señalan las autoridades, está relacionada con las ratas. La afección se transmite fácilmente de animales a humanos y es probable que las personas contraigan el virus a través del contacto con la orina de los roedores infectados.

Los contagios registrados en lo que va de año representan más del 25 por ciento del total durante la década y media anterior. Entre 2006 y 2020, solo se detectaron 57 casos de la enfermedad de Weil, o leptospirosis, en la ciudad de Estados Unidos. Una persona puede infectarse cuando entra en contacto con el líquido urinario del animal afectado a través de alimentos o agua. Se sabe que los roedores no son los únicos que pueden transmitir esta enfermedad, pero también incluye vacas, cerdos, caballos o perros.

En Nueva York corre el pánico por la gran cantidad de almacenes que suelen presentar estos roedores. Si una rata infectada se cuela en una máquina de alimentos y deja restos en alguno de las latas o bolsas que conserva, el producto en cuestión pasaría a ser peligroso, ya que una persona, después de tocarlo e incluso succionarlo, quedaría infectada.

En relación a los síntomas, pueden aparecer abruptamente de dos días a cuatro semanas después de que una persona se expone a la bacteria. Incluye fiebre, dolores de cabeza, escalofríos, dolor abdominal y diarrea, entre otros. También ictericia, una afección en la que la piel y los ojos de una persona se vuelven amarillos.

La leptospirosis se trata de una infección bacteriana apodada como “enfermedad de Weil”, por el científico alemán que la descubrió a finales del siglo XVII. La enfermedad puede ocurrir en dos fases, con la primera ola relativamente menor que presenta síntomas similares a los de una gripe. Pero si no se tratan, entran en una segunda fase más grave que va desde la insuficiencia renal o hepática hasta la muerte.

Cada año se reportan en torno a 100 casos en Estados Unidos, aunque es Puerto Rico el país que presenta la mayoría de los casos. Un estudio publicado por los Institutos Nacionales de Salud en 2015 estimó que hay más de un millón de casos de la enfermedad en todo el mundo y casi 60.000 muertes al año. La enfermedad ha sido señalada en cuatro de los cinco condados de Nueva York, en donde solo Staten Island ha esquivado hasta ahora. 13 de los casos acabaron en hospitalización.

Una población abundante que aumenta el peligro

Según datos locales, hay alrededor de dos millones de ratas marrones que viven en Nueva York. Eso es aproximadamente una cuarta parte de la población humana de la ciudad. Es decir, una rata por cada cuatro personas. “Las bacterias pueden persistir en ambientes cálidos y húmedos. Los cambios en las condiciones climáticas que permiten que las bacterias persistan (condiciones climáticas más cálidas y húmedas) podrían contribuir a un aumento de los casos humanos”', advirtieron desde el departamento de salud.

Otro problema más que se le acumula a la ciudad de Nueva York, que ve como comienzo una “segunda pandemia” después de la que está afrontando del coronavirus. Tras haber obligado a todos sus trabajadores del sector sanitario y educativo a vacunarse, impondrá ahora el mismo mandato al resto de funcionarios, que tendrán hasta el viernes 29 de octubre para ponerse, al menos, la primera dosis de la vacuna. Así lo ha anunciado este miércoles el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, en un programa de radio matutino y en una rueda de prensa donde precisó que todo aquel que no se vacune para esa fecha será puesto en excedencia obligatoria.