Crisis

Qué está pasando en Sri Lanka y por qué la falta de combustible es clave en esta revuelta social

Gotabaya Rajapaksa huye del país y nombra presidente interino al polémico Ranil Wickremesinghe en un país bajo el estado de emergencia

Miles de ciudadanos en Sri Lankas asaltaron la vivienda oficial del presidente y del primer ministro
Miles de ciudadanos en Sri Lankas asaltaron la vivienda oficial del presidente y del primer ministroRafiq MaqboolAgencia AP

El presidente de Sri Lanka, Gotabaya Rajapaksa, el “héroe de guerra” echado de su residencia oficial el sábado por una revuelta social, ha salido del país y abandonado el cargo obligado por el rechazo y meses de protestas en medio de la peor crisis económica de su historia. La Fuerza Aérea confirmó la salida del presidente Rajapaksa con destino al paradisíaco archipiélago de Maldivas, poniendo fin a cuatro días de incógnita sobre el paradero el líder que llegó a ser conocido como el “terminator”, por su rol en la guerra civil contra los Tigres Tamiles.

Antes de irse, Rajapaksa ha nombrado como mandatario interino al primer ministro, Ranil Wickremesinghe, en línea con el artículo 37.1 de la Constitución, tal y como ha recogido el diario Daily Mirror. Este artículo contempla que en caso de enfermedad, ausencia del país y otros motivos que le impidan ejercer sus competencias, el presidente puede nombrar al primer ministro para el cargo durante este periodo de tiempo, informa EP.

Horas antes, Wickremesinghe había declarado el estado de emergencia en todo el país e impuesto un toque de queda en el oeste de la isla ante las nuevas protestas, mientras que las fuerzas de seguridad han empleado gases lacrimógenos para intentar dispersar a un grupo de manifestantes en los alrededores de la oficina del primer ministro. Algunos de ellos han intentado entrar por la fuerza en las instalaciones, según la cadena de televisión británica BBC.

En Colombo, la capital, se están produciendo este miércoles nuevas protestas después de que se conociera que el presidente ha salido del país en la misma jornada en la que la nación espera que el mandatario formalice su renuncia.

Sin un mensaje a la nación ni una ruta a seguir tras su salida, la nación insular debe pasar a atender inmediatamente la crisis económica, casi sin reservas, muy endeudada, y sumergida en una profunda escasez de productos básicos. Las masivas manifestaciones se enmarcan en un contexto de protestas continuadas desde hace meses, derivada de la merma de divisas de reservas internacionales y de un gran endeudamiento, donde la falta de combustible se ha colocado como un elemento clave. No son pocos los analistas que piensan que otros países de la zona e incluso de la Unión Europea puede sufrir revueltas similares como la que está viviendo Sri Lanka.

Gotabaya Rajapaksa en su toma de posesión como presidente de Sri Lanka en 2019
Gotabaya Rajapaksa en su toma de posesión como presidente de Sri Lanka en 2019Eranga JayawardenaAgencia AP

Gotabaya, que fue electo a finales de 2019, anunció su renuncia a través del presidente del Parlamento tras huir de su residencia oficial el pasado sábado, antes de que fuera asaltada por millas de personas en una revuelta popular que pedía desde hace meses su dimisión.

El anuncio del presidente, sin embargo, precisaba que renunciaría a su cargo el día 13 de julio, sin que hasta ahora Rajapaksa se haya dirigido directamente a la nación. Se desconoce si el mandatario se dirigirá al país para hacer efectivo su anuncio, mientras que los partidos políticos y la población esperan que se declare el vacío para elegir su relevo.

De acuerdo con la Constitución esrilanquesa, una vez declarada la ausencia del presidente y del primer ministro, el jefe del Parlamento asume las funciones y dentro de un plazo de 30 días, el legislativo elige un presidente interino para completar el mandato.

El primer ministro de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, que también ha dimitido
El primer ministro de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, que también ha dimitidoEranga JayawardenaAgencia AP

Aunque el primer ministro, Ranil Wickremesinghe, anunció el sábado pasado que también cesaría en el cargo, esta renuncia aún no se ha formalizado y su despacho ha seguido informando de asuntos del país. Los partidos de la oposición, que ya han comenzado a elegir sus candidatos entre los miembros del Parlamento, han acordado ya elegir el próximo 20 de julio al nuevo presidente de Sri Lanka.

Entretanto, nuevas protestas tuvieron lugar hoy en el perímetro de la oficina del Wickremesinghe para exigir que el primer ministro abandone el cargo para el que fue designado hace apenas dos meses.

Cómo empezó la crisis en Sri Lanka

La elección del nuevo presidente y su Gabinete es un asunto urgente para Sri Lanka, que se encuentra en este momento negociando con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un programa de rescate que el permita restaurar la estabilidad fiscal. Esta nación de 22 millones de habitantes necesita con urgencia flujo de caja para la adquisición de combustible, alimentos y medicinas.

Un manifestante con la bandera nacional frente a la residencia del presidente Gotabaya Rajapaksa en Colombo
Un manifestante con la bandera nacional frente a la residencia del presidente Gotabaya Rajapaksa en ColomboEranga JayawardenaAgencia AP

A principios del mes de julio, Sri Lanka se convirtió en el primer país del mundo en restringir la venta de combustible a la ciudadanía desde la crisis del petróleo de los años 70, a través de un decreto en el que los propietarios de vehículos privados tenían prohibido usar las gasolineras hasta este domingo. Las autoridades del país han dado orden de acelerar el protocolo de entrega de 7.400 toneladas de gas licuado que llegarán en las próximas horas para aliviar la extraordinaria crisis económica y energética que atraviesa la nación.

Sri Lanka afronta la peor crisis económica desde su independencia del Imperio británico en 1948, provocada en parte por el gran endeudamiento, erradas políticas gubernamentales, y el impacto de los atentados de Pascua y la pandemia del coronavirus en el turismo.

Con las reservas internacionales marcando mínimos históricos y la decisión de suspender los pagos de su deuda exterior el pasado abril, Sri Lanka se acercó al FMI en busca de una línea de crédito para restaurar la estabilidad fiscal, al tiempo que intenta alcanzar acuerdos con sus prestamistas para la reestructuración de la deuda.