Un informe internacional advertía en mayo del apoyo talibán a Al Qaeda

Desde que el Emirato Islámico de Afganistán se hizo con el poder en Kabul, a mediados de agosto de 2021, los principales líderes talibanes, en busca de reconocimiento internacional, han tratado de convencer a Occidente de que ya no apoya a ningún grupo terrorista en Afganistán. Sin embargo, un informe del Equipo de Vigilancia de la ONU presentado al Consejo de Seguridad de la ONU revela que los talibanes afganos continúan teniendo una colaboración activa con Al-Qaeda y mantienen el control directo de otras organizaciones terroristas extranjeras.

Por otra parte, esta noche las redes yihadistasa se llenaron de amenazas contra Estados Unidos por la operación de Kabul y aseguraban que nuevos “Zawahiris” se pondrían al frente de la organización terrorista para vengar a su líder.

El informe, titulado “Decimotercer informe del Equipo de Supervisión de Sanciones y Apoyo Analítico presentado de conformidad con la Resolución 2611 (2021) sobre los talibanes y otras personas y entidades asociadas que constituyen una amenaza para la paz, la estabilidad y la seguridad de Afganistán”, se publicó el 26 de mayo de 2022, informa Memri.

Según el informe, ya no existe una distinción entre las finanzas del Estado afgano y la organización yihadista talibán afgano. “Ahora que están dirigiendo Afganistán, las finanzas de los talibanes se superponen con las finanzas estatales, aunque en un momento de crisis económica”, dice.

Sin embargo, el informe es una acusación contra los talibanes afganos por apoyar y albergar organizaciones terroristas yihadistas extranjeras. Jaish-e-Muhammad (JeM) y Lashkar-e-Taiba (LeT), dos organizaciones yihadistas paquistaníes que pasaron a la clandestinidad en los últimos años tras la presión occidental sobre Pakistán, viven bajo el patrocinio de los talibanes afganos en varios campos de entrenamiento antiterroristas en Afganistán. De manera similar, los talibanes afganos continúan protegiendo y trabajando junto con Jamaat Ansarullah, un aliado cercano de Al-Qaeda en el subcontinente indio (AQIS), otra rama de Al-Qaeda. El Movimiento Islámico de Turkestán Oriental (ETIM), un grupo terrorista anti-China compuesto por musulmanes uigures de la provincia china de Xinjiang (Turquestán Oriental), también está protegido por los talibanes que han mantenido estrechos vínculos con China en los últimos años, subraya.