Desnuclearización

Corea del Norte lanza dos misiles de crucero hacia el Mar Amarillo

Washington y Seúl han advertido que Kim Jong Un se prepara para efectuar su séptimo ensayo nuclear.

Una pantalla de televisión en la que se informa sobre el lanzamiento de misiles de Corea del Norte
Una pantalla de televisión en la que se informa sobre el lanzamiento de misiles de Corea del NorteLee Jin-manAgencia AP

momento de gran preocupación porque Estados Unidos cree que el régimen de Kim Jong Un está a punto de realizar el primer lanzamiento con un misil nuclear desde 2017.

China no es el único temido en el Indo-Pacifico. Aunque mucho menor en tamaño e influencia, Corea del Norte ha dejado claro que no está dispuesta a dialogar por la desnuclearización, algo que preocupa a sus países vecinos.

El miércoles por la mañana, Corea del Norte lanzó dos misiles de tipo crucero al Mar Amarillo (el mar entre las dos Coreas), según comunicó el ministerio de Defensa surcoreano.

Se trata de la primera acción militar de Kim Jong Un desde el pasado 10 de julio. A diferencia de los misiles balísticos y los ensayos nucleares, el Consejo de Seguridad de la ONU no prohíbe a Corea del Norte realizar pruebas de este tipo.

Dos días antes, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, había ofrecido ayuda económica a Corea del Norte a cambio de que ésta pusiera fin al desarrollo de armas nucleares y comenzara la desnuclearización.

El mismo miércoles, horas después de la demostración militar norcoreana, Yoon reiteró el mensaje en un discurso conmemorativo por sus primeros 100 días de mandato y recordó que durante su campaña había expresado ya su deseo de abrir un diálogo con Pyongyang.

“Cualquier diálogo entre los líderes del Sur y del Norte, o las negociaciones entre funcionarios de nivel de trabajo, no debe ser un espectáculo político, sino que debe contribuir a establecer una paz sustantiva en la península de Corea y en el noreste de Asia”, dijo.

El lanzamiento de los misiles puede interpretarse como una respuesta a varios acontecimientos de esta semana que han enfurecido a Pyongyang.

La demostración militar ocurrió un día después de que Seúl y Washington iniciaran ejercicios preliminares a las maniobras conjuntas de defensa a gran escala que tendrá lugar del 22 de agosto al 1 de septiembre. Las maniobras conjuntas en campo real, llamadas “Ultra Freedom Shield”, se habían suspendido anteriormente para favorecer el acercamiento con Corea del Norte.  Los intentos de acercamiento se vieron frustrados tras el fracaso de la cumbre sobre desnuclearización de Hanoi en 2019, en las que participaron los entonces líderes, Moon Jae-in, Kim Jong-Un y Donald Trump.

Ante el incremento de amenazas militares en los últimos años, Corea del Sur ha buscado el apoyo internacional de aliados como EE UU. El martes y el miércoles, el viceministro de Defensa surcoreano, Heo Tae-keun, y el subsecretario de Defensa para Asia Oriental estadounidense, Siddharth Mohandas, mantuvieron su reunión anual de defensa. Acordaron fortalecer la cooperación entre ambos países y trataron temas como la posibilidad de implementar un sistema de defensa capaz de interceptar misiles, aumentar el alcance de sus maniobras conjuntas y reforzar la cooperación trilateral en materia de seguridad con Japón.

Según ha informado el Pentágono, EE UU, Corea del Sur y Japón participaron en un ejercicio de defensa contra misiles balísticos frente a la costa de Hawái la semana pasada.

El régimen de Kim Jong Un ha llevado a cabo una larga serie de ensayos de armas este año, entre ellos el disparo de un misil balístico intercontinental. A finales de julio, el líder norcoreano afirmó incluso que su país está “listo para movilizar” su fuerza de disuasión.

Las autoridades de Washington y Seúl han advertido que el Norte se prepara para efectuar su séptimo ensayo nuclear.