
Lituania
La actividad en el aeropuerto de la capital de Lituania vuelve a la normalidad tras haber detectado "objetos voladores" sospechosos en su espacio aéreo
El aeropuerto de Vilnius reanudó sus operaciones esta madrugada después de seis horas de cierre preventivo por el avistamiento de una serie de balones, lo que causó la cancelación de 30 vuelos y afectó a unos seis mil pasajeros

El aeropuerto internacional de Vilnius, capital de Lituania, reabrió sus puertas en la mañana de este domingo 5 de octubre después de permanecer cerrado durante aproximadamente seis horas debido a una alerta de seguridad aérea.
Según informó la operadora del aeropuerto, el cierre se implementó como medida preventiva después de recibir a las 22:16 hora local un aviso sobre "una posible serie de globos volando en dirección al Aeropuerto de Vilnius". Las restricciones se mantuvieron hasta las 04:50 de la madrugada, cuando finalmente se reabrió el espacio aéreo.
Esta decisión de seguridad resultó en la cancelación de 30 vuelos programados y afectó aproximadamente a seis mil pasajeros que tenían previsto viajar durante la noche del sábado y la madrugada del domingo. La operadora advirtió que aunque las operaciones han vuelto a la normalidad, podrían registrarse más retrasos a lo largo del día como consecuencia de la interrupción del tráfico aéreo durante esas seis horas críticas.
Seguridad aérea en alerta en toda Europa
Horas antes del cierre en Vilnius, el aeropuerto de Múnich en Alemania había suspendido sus operaciones debido al avistamiento de drones no autorizados sobre sus instalaciones, marcando el segundo episodio de esta naturaleza registrado en esa terminal aeroportuaria en la misma semana.
Las autoridades alemanas continúan investigando los casos ocurridos en Múnich, mientras se incrementan las especulaciones sobre el origen de estos incidentes. Diversos analistas y gobiernos europeos han señalado a Rusia como responsable de estas interferencias en el espacio aéreo, aunque el Kremlin ha negado repetidamente cualquier participación en estos eventos que comprometen la seguridad de la aviación civil.
La situación se extiende más allá de Alemania y Lituania, con reportes similares registrados en otros países europeos. En el estado alemán de Schleswig-Holstein, al norte del país, se avistó un conjunto de drones que llevó al gobierno germánico a considerar autorizar a las fuerzas armadas para derribar estos dispositivos. Bélgica también ha enfrentado incidentes comparables cerca de su frontera con Alemania.
El 22 de septiembre, el aeropuerto de Copenhague en Dinamarca tuvo que cerrar su espacio aéreo durante aproximadamente cuatro horas por motivos idénticos, demostrando la vulnerabilidad de las infraestructuras críticas de aviación ante este tipo de amenazas no convencionales que se repiten con frecuencia alarmante.
✕
Accede a tu cuenta para comentar