El vídeo de un caza F-35 que se estrella contra el portaaviones USS Carl Vinson en el mar de China Meridional

A principios de semana, un F-35 estadounidense se estrelló en la cubierta del portaviones USS Carl Vinson en el Mar de China Meridional, dejando siete heridos cuando el caza de Estados Unidos intentaba aterrizar en el barco.

El suceso se definió como un “incidente de aterrizaje” y el piloto cayó al mar, siendo rescatado por un helicóptero. Tres de los heridos fueron llevados al hospital y el resto pudo ser atendido en el mismo portaaviones.

En las redes sociales, se han viralizado unas imágenes sobre el momento en el que el F-35 impactó contra el portaaviones, y la Armada de Estados Unidos confirmó la autenticidad del vídeo.

De unos 18 segundos, el vídeo muestra al avión de combate acercándose al portaaviones, pero es cortado abruptamente antes del intento de aterrizaje. Luego se puede ver una columna de humo en los segundos finales, y el caza acaba en el mar tras el percance.

“Hay una investigación en curso sobre el incidente”, comunicó el comandante Hayley Sims, portavoz de la Séptima Flota, citado por el portal especializado Navy Times. El piloto estaba realizando operaciones de vuelo de rutina cuando ocurrió el accidente.

El USS Carl Vinson, con un escuadrón de combate de cazas F-35C, zarpó de San Diego, en California, a principios de agosto del 2021, y llegó en septiembre al mar de China Meridional. Fue el primer portaviones de EE.UU. en ser desplegado con esas aeronaves de quinta generación.

“La Marina de los EE. UU. está haciendo todo lo posible para realizar las operaciones de recuperación del avión F-35C involucrado en el percance a bordo del USS Carl Vinson”, es todo lo que un portavoz de la Séptima Flota de los EE. UU., el teniente Nicholas Lingo, le dijo a CNN el miércoles.

Las Fuerzas Armadas de EE.UU están tratando de recuperar su avión de combate, una operación extremadamente compleja ya que será supervisada cerca de Pekín, por lo que ha generado un “conflicto” entre Estados Unidos y China. Los buques de la guardia costera y naval chinos mantienen la vigilancia constante, y desde EE.UU. alertan que si China intenta localizarlo, podría “examinarlo a fondo” antes de cualquier posibilidad de devolverlo al país norteamericano.