Polémicas

El “gazpacho” de errores de Taylor Greene: de cuestionar los atentados del 11-S a llamar “nazis” a los vacunados contra el coronavirus

La controvertida legisladora republicana por Georgia y fiel seguidora de Donald Trump confundió, en una de sus últimas polémicas, a la sopa fría de tomate con la Gestapo del Nazismo

La representante por Georgia y fiel seguidora del expresidente Donald Trump ha utilizado su cargo parar compartir noticias falsas en beneficio del partido republicano a través de las redes sociales.
La representante por Georgia y fiel seguidora del expresidente Donald Trump ha utilizado su cargo parar compartir noticias falsas en beneficio del partido republicano a través de las redes sociales.DAVID MAXWELLAgencia EFE

La controvertida Marjorie Taylor Greene ha vuelto a ser noticia en las últimas horas después de una confusión muy llamativa en sus últimas declaraciones. La polémica legisladora republicana por Georgia confundió en una entrevista con la cadena conservadora OAN a la policía secreta nazi Gestapo con el “gazpacho”, la sopa fría de España donde el tomate es protagonista.

“Ahora tenemos a la policía del gazpacho de Nancy Pelosi espiando a los miembros del Congreso, en el trabajo legislativo, a nuestros equipos y en los ciudadanos estadounidenses que quieren venir a hablar con sus representantes”, dijo en la entrevista.

Esta no es el único error o polémica en la que la congresista defensora del expresidente norteamericano Donald Trump ha estado envuelta. El pasado jueves, la Cámara de Representantes de Estados Unidos la sancionó por “la continua difusión de teorías conspirativas”. La republicana se ha mostrado muy crítica con la gestión de la pandemia, así como “el invento del virus chino” del que siempre ha hablado. También ha sido una fiel antivacunas y ha criticado la campaña de vacunación en el país.

Tras la sentencia en la que los representantes republicanos Liz Cheney y Adam Kinzinger fueran censurados “por el Comité Nacional Republicano por estar en el comité selecto del 6 de enero”, Greene argumentó que el propio partido necesitaba “una guerra civil”, en una entrevista con The Washington Times.

La representante por Georgia ha utilizado su cargo parar compartir noticias falsas en beneficio del partido republicano a través de las redes sociales. El pasado mes de enero, Twitter eliminó la cuenta personal de Greene por difundir “información falsa sobre la pandemia del coronavirus”. “A nadie le importan las variantes del coronavirus”, decía en una de sus publicaciones. Del mismo modo, equiparó la obligación de llevar mascarillas o vacunarse con las estrellas amarillas que la Alemania nazi colocaba a los judíos. “Los empleados vacunados obtienen un logotipo de vacunación al igual que los nazis obligaron a los judíos a llevar una estrella dorada”, tuiteó en su cuenta personal.

Pero no fue la primera vez que esta red social censuró a la congresista, pues también fue suspendida de manera temporal por compartir " información errónea sobre las elecciones presidenciales de 2020″.

Tras esta polémica, Greene se manifestó y denunció que las plataformas de redes sociales “no son capaces de evitar que la verdad se difunda”. “Los demócratas comunistas no pueden detener la verdad. ¡Venceremos!” decía en un comunicado que recogió CNN.

Antes de ser elegida, Taylor Greene había afirmado que Nancy Pelosi era “culpable de traición”, pidiendo así “la pena de muerte” como castigo por el supuesto delito que había cometido. Entre sus polémicas con las redes sociales, también se encuentra un “me gusta” que dio a un comentario de Facebook de un usuario que sugería “una bala en al cabeza de Pelosi”.

También cuestionó eventos pasados como un tiroteo en una escuela de Florida en el año 2018, que según la republicana, había sido “inventado para endurecer la legislación de armas de fuego”. Marjorie Taylor Greene llegó a dudar del atentado del 11 de septiembre de 2001, especulando que fueron una alerta falsa, sin “creer” que un avión se estrellara contra el Pentágono.