Armamento

Así son las pruebas de lanzamiento en cubierta del nuevo super portaaviones de EEUU: lanzando "coches" a un río

Probaron a lanzar vehículos al río James, en Virginia, con el objetivo de testear si el buque está preparado para hacer despegar aeronaves de combate

Un F-35 en un portaaviones de EEUU
Un F-35 en un portaaviones de EEUULockheed Martin

El próximo buque de guerra de la marina estadounidense, el USS John F. Kennedy (CVN-79), se encuentra en la fase final de su desarrollo. Es un portaaviones que estará operativo a partir de 2025 en la Flota del Pacífico, pertenece a la clase General R. Ford y su construcción tuvo un coste, de manera aproximada, 12.936 millones de dólares.

Actualmente, solamente está operativo, de esta categoría, el portaaviones homónimo a la clase a la que pertenece, el General R. Ford (CVN-78), en servicio desde el 2017. Además del USS John F. Kennedy (CVN-79), también se unirán a este nivel el USS Enterprise (CVN-80) y el USS Doris Miller (CVN-81), previstos para lanzarse en marzo de 2028 y febrero de 2032, respectivamente.

Con ello, la claseGeneral R. Ford reemplazará a los portaaviones de la clase Nimitz, que durante 40 años han servido de guía al resto de buques de guerra de este tipo en Estados Unidos. Por citar ciertos elementos comunes, esta nueva clase de buques de guerra son fabricados por la empresa de construcción navalHuntington Ingalls Industries Newport News Shipbuilding, son propulsados por dos reactores nucleares y pueden alcanzar una velocidad de más de 30 nudos.

Coches al río James, en Virginia

Lo último que ha compartido la empresa constructora sobre el USS John F. Kennedy ha sido un vídeo sobre unas pruebas de lanzamiento en cubierta en el río James, en Virginia, Estados Unidos. Concretamente, han utilizado "estructuras parecidas a coches, con ruedas y con un peso aproximado de 80.000 libras para simular el peso de una aeronave de combate", según comenta la propia Huntington Ingalls Industries.

Posteriormente, estas estructuras son recuperadas del río y se vuelven a lanzar hasta el fin de la prueba para asegurar la fiabilidad de la catapulta para hacer despegar cazas y helicópteros.

 

Como curiosidad, estas estructuras utilizadas para los lanzamientos de prueba han tenido mensajes de agradecimiento y gratitud, escritos por miembros de las familias de los constructores del buque, con motivo del Día de la Familia en el astillero virginiano, celebrado en octubre.