Las elecciones de EE UU: la secuela de 2020

Ayer se celebró en Estados Unidos el llamado «Supermartes»: 15 elecciones primarias en 15 estados y un caucus en la isla de Samoa Americana. Si Trump arrasa es probable que la precandidata republicana y única contrincante del expresidente, Nikki Haley, decida suspender su campaña y le ceda la nominación al predecesor de Biden en la Casa Blanca.

Según el promedio de encuestas que realiza el portal Real Clear Politics (RCP), a nivel nacional la diferencia entre Trump y Haley supera el 60%. La brecha es muy grande y precisamente el Supermartes podría ser la estocada final para la ex gobernadora de Carolina del Sur. El apoyo en las urnas a Trump podría incrementarse este martes considerando una lógica de «utilidad del voto»; viendo la diferencia, un segmento de republicanos que, aunque no confíen plenamente en Trump, decidan apoyarlo, ganando tiempo para la elección final en contra de la candidatura demócrata.

Otro promedio de encuestas del mismo RCP revela que Haley tendría más opciones de vencer a Biden en noviembre que el mismo Trump. Mientras la precandidata republicana le sacaría 4 puntos al actual presidente en las elecciones de noviembre -siempre que la contienda sea únicamente entre ambos- Trump y el inquilino de la Casa Blanca se encuentran en empate técnico cuando el escenario electoral resulta entre ellos dos. Así, Haley tiene una capacidad mayor de atraer un voto indeciso o de decisión moderada. Por el contrario, Trump se consolida como el candidato de la polarización que apuesta más a consolidar posturas irreconciliables. Es difícil que Haley le arrebate la nominación al expresidente. Es probable que los EE UU viva otro año electoral tenso, con el entendimiento y los grises divorciados de la campaña presidencial.