Temor

Una peligrosa ola de calor amenaza a millones de personas en Europa, con temperaturas de hasta 45 grados

Reino Unido, Portugal , Francia e Italia se enfrentan a temperaturas récord esta semana con poco alivio a la vista

ZARAGOZA, 11/07/2022.- El sol ocultándose en Zaragoza. EFE/ Javier Belver
ZARAGOZA, 11/07/2022.- El sol ocultándose en Zaragoza. EFE/ Javier BelverJAVIER BELVERAgencia EFE

Una nueva ola de calor azota gran parte de Europadespués del segundo mes de junio más cálido del que se tiene constancia. Desde este martes y hasta mediados de julio la temperatura máxima superará los 35°C, incluso los 45°C en Europa Central.

Los gobiernos de varios países están elaborando planes para la primera emergencia nacional de ola de calor que causaría, al menos en algunas regiones, una interrupción generalizada en las escuelas, los viajes y los servicios de salud.

Las altas temperaturas son controladas de cerca por el programa europeo de observación de la Tierra Copernicus. Pero esta situación es tan atípica que para los meteorólogos alemanes todavía no está claro cuánto de caluroso será.

“Todavía pueden pasar muchas cosas, los modelos todavía saltan mucho de un lado a otro”, dice el meteorólogo Simon Trippler del Servicio Meteorológico Alemán (DWD). “Pero vemos una masa de aire potencialmente extraordinaria, son concebibles nuevos récords de temperatura”, agregó

Calor récord en Reino Unido

En Reino Unido, altos funcionarios celebraron este pasado lunes una reunión de crisis de “cobra” dentro de Downing Street, pues los meteorólogos predijeron que el récord del día más caluroso de Gran Bretaña podría superarse este fin de semana, alcanzando posiblemente la barrera de los 40 grados por primera vez (la temperatura máxima récord en tierras británicas es de 38,7 °C).

El gobierno británico, desde la Oficina Meteorológica nacional, emitió una alerta meteorológica para diversas zonas del país, lo que indica un “peligro para la vida” causado por la ola de calor. Tal advertencia solo se había emitido dos veces hasta ahora.

Reino Unido también podría sufrir cierres de carreteras debido al deshielo de las superficies, así como retrasos en los viajes en tren y en avión en medio del calor extremo.

Francia, entre rojo y amarillo

También el mapa meteorológico se pintó otra vez entre rojo y amarillo en Francia. El país recibió este martes la llegada de una masa de calor, que debería durar al menos entre ocho y diez días. “La evolución es muy probable hacia una ola de calor, con un pico probablemente entre el sábado 16 de julio y el martes 19 de julio “, informó Météo-France.

Las alertas por calor cubren partes del este de Francia, incluyendo Toulouse y Burdeos. En el suroeste del país se esperan temperaturas de hasta 39ºC.

Dos incendios, activos desde el martes, calcinaron ya 1.700 hectáreas de bosques en la región de Burdeos. El mayor destruyó 1.000 hectáreas de pinos cerca de Landiras, a unos 40 kilómetros de Burdeos. El segundo se declaró cerca de la turística Duna de Pilat, situada en la bahía de Arcachon. Las llamas, que consumieron unas 700 hectáreas de viejos pinos, obligaron a evacuar a unos 6.000 campistas de forma preventiva. Este miércoles el fuego seguía activo, según los bomberos.

Ola de incendios en Portugal

En Portugal, la amenaza de altas temperaturas agravan la ola de incendios que desde hace al menos cuatro días castigan al país, con una semana presentando una meteorología asfixiante. El Instituto del Mar y de la Atmósfera anunció la alerta naranja por temperaturas altas en ocho de las 18 regiones del país y la situación empeoró ayer, cuando todos pasen a estar en alerta naranja, menos el Algarve.

Una persona murió en un incendio en la región de Aveiro (norte), según los servicios de emergencia, que llevan varios días movilizados. El centro del país, presa de las llamas desde hace varios días, sigue siendo la zona más afectada por los incendios forestales, que volvieron a activarse este martes por la tarde debido al calor y el viento.

Hoy miércoles por la mañana, cuatro grandes incendios movilizaban a más de 1.500 bomberos en los municipios de Leiria, Pombal y Ourém, situados en la confluencia de los distritos de Leiria y Santarém, a poco más de 100 kilómetros de Lisboa. “Las previsiones meteorológicas para los próximos días siguen siendo extremadamente preocupantes por el riesgo de incendios”, dijo el martes el primer ministro Antonio Costa.

Italia declara estado de emergencia

La sequía en el norte de Italia se ha convertido en el centro de la preocupación. El país ha declarado el estado de emergencia para cinco regiones, y las lluvias no parecen tener intención de regresar.

Y es que gran parte de Italia también ha sufrido las consecuencias de esta fuerte ola de calor veraniega. En Verona se alcanzarán máximas de 38 °C este viernes. Once personas murieron el pasado 3 de julio tras una avalancha de hielo en el glaciar de la Marmolada, en los Alpes italianos.

El primer ministro de Italia, Mario Draghi, culpó el desplome al “deterioro del medio ambiente y la situación climática”.

Cúpula de calor desde Marruecos

Esta situación, casi generalizada en el continente europeo, se debe principalmente a una cúpula de calor que se ha instalado sobre Marruecos y se eleva hacia el oeste. “Esta cúpula actúa como una tapa que atrapa el aire caliente. Poco a poco, se comprime, y esta compresión provoca físicamente un aumento de la temperatura “, explica Sébastien Léas, meteorólogo de Météo Francia.

Esta fuerte ola de calor llegará para todos. “Todos los países del sur de Europa están preocupados, con temperaturas más altas en España, pero temperaturas que podrían permanecer altas durante más tiempo en Italia”, explica Pascal Scaviner. Los meteorólogos coinciden en un ligero descenso de temperaturas hacia el viernes, aunque al mismo tiempo su evolución sigue siendo incierta para anticipar que pueda suceder el fin de semana.

Las autoridades adelantan que esta situación podría significar una emergencia. Los llamamientos de los gobiernos van desde complicaciones en la cadena de suministros de alimentos, así como la interrupción de las carreteras, ferrocarril, cortes eléctricos por alto consumo, hasta el cierre de clases o incluso que las plantas de energía nuclear queden fuera de servicio.