Femke Wiersma, la exconcursante de ‘Granjero busca esposa’ que asumirá el Ministerio de Agricultura de Países Bajos

Una antigua concursante del programa de televisión ‘Granjero busca esposa’ será la próxima ministra de Agricultura, Pesca, Seguridad Alimentaria y Naturaleza de Países Bajos. Femke Wiersma, cofundadora del populista Movimiento Campesino-Ciudadano (BBB) que lidera Caroline van der Plas, asumirá una de las carteras correspondientes a su formación en el nuevo Gabinete del primer ministro Dick Schoof, encabezado por los ultras de Geert Wilders y del que forman parte hasta cuatro partidos de derecha y ultraderecha.

Exasesora del sindicato neerlandés de productores lácteos y actual funcionaria regional, Wiersma adquirió cierta fama a nivel nacional tras su paso por el conocido reality de televisión. Allí conoció a un granjero lechero con el que se casó y tuvo tres hijos, y del que después se divorció. «Fantástico que ahora participemos en este Gobierno, nosotros como BBB realmente asumimos responsabilidades, incluso cuando se trata de cuestiones complejas. No huimos de ello. Considero un gran honor que se me confíe esta importantísima tarea. En los próximos años, haré todo lo posible por devolver las perspectivas a los agricultores, horticultores, cultivadores y pescadores», declaró Wiersma tras su nombramiento.

El Movimiento Campesino-Ciudadano, que obtuvo siete escaños en las elecciones del pasado mes de noviembre en las que ganó el Partido de la Libertad (PVV) de Wilders, revolucionó con su irrupción la política neerlandesa en las provinciales de marzo de 2023. El partido populista agrario ganó aquellos comicios prácticamente surgiendo de la nada. Wiersma ya había ocupado la segunda posición de las listas en las legislativas de 2021, pero sólo Van der Plas, la todavía número uno, sacó escaño.

El pacto de coalición anunciado en mayo incluye una revisión de las normas sobre nitrógeno para permitir a los agricultores rociar más estiércol en sus campos e impedir las expropiaciones forzosas de granjas. La próxima titular de Agricultura trasladó al semanario Nieuwe Oogst que el pacto «aporta perspectivas para la agricultura, pero que el diablo está en los detalles». Y añadió que, como ejecutiva provincial, estaba dispuesta a contribuir a su aplicación. Ahora, sin embargo, podrá hacerlo como ministra.