Guaidó condiciona el diálogo a la caída de Maduro

El presidente interino de Venezuela no quiere que se convoquen elecciones si Maduro no abandona antes el poder

Juan Guaidó, presidente de Venezuela, dijo ayer sobre las conversaciones mantenidas por el chavismo y la oposición en Oslo que el siguiente escenario solo será viable si se cumple con la hoja de ruta de la Asamblea Nacional, dominada por las fuerzasantichavistas. Ese camino pasa por el cese de la usurpación del poder por parte de Nicolás Maduro, seguido de elecciones limpias y transparentes.

Las conversaciones en Oslo de las últimas semanas no condujeron a ningún avance significativo, si bien se dejó abierta la puerta para futuros contactos entre ambas partes. Noruega, patrocinador de los encuentros, aboga por seguir con más rondas para ver si se puede hallar una salida política a la crisis de Venezuela.

El Grupo de Lima –formado por países americanos y defensor de una posición más dura con respecto a Maduro– y el Grupo de Contacto –promovido por la Unión Europea y cuyo primer objetivo es la convocatoria de elecciones libres– han ido unificando posiciones. Guaidó ha puesto sobre la mesa de Oslo como primer punto la salida de Maduro del poder, por delante de la convocatoria de elecciones. Sin embargo, algunos miembros de la oposición –como la ex diputada María Corina Machado y Antonio Ledezma, ex alcalde de Caracas– se han mostrado críticos.

Dentro de la Asamblea Nacional, los diputados antichavistas han mostrado su conformidad sobre los contactos de Oslo al considerar que esas reuniones podrían facilitar la caída del líder bolivariano. La Administración de EE UU ha dicho que «lo único que se puede negociar con Maduro es su salida del poder». Desde el oficialismo rechazan entregar la presidencia a un hipotético Gobierno de transición, ni menos aún a la Asamblea Nacional.