Política

Argentina

Guaidó diseña su gobierno

La oposición mide hoy sus fuerzas frente al chavismo con manifestaciones convocadas en todo el mundo.

Nicolás Maduro participó ayer en unas maniobras militares en Caracas en las que se preparó la respuesta a las manifestaciones de la oposición
Nicolás Maduro participó ayer en unas maniobras militares en Caracas en las que se preparó la respuesta a las manifestaciones de la oposiciónlarazon

La oposición mide hoy sus fuerzas frente al chavismo con manifestaciones convocadas en todo el mundo.

Una gran movilización está convocada hoy en Venezuela y distintas ciudades del mundo en favor del reconocimiento internacional a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela. La convocatoria en Caracas será en las oficinas de la Unión Europea, dado que mañana vence el plazo inicial de ocho días que había puesto el club comunitario para convocar elecciones, so pena de considerar al presidente de la Asamblea Nacional como el legítimo jefe de Estado venezolano.

Entretanto, ayer el presidente de Colombia, Iván Duque, envió un mensaje a la Unión Europea: «No demoren el reconocimiento a Juan Guaidó. Si en épocas de injusticias se es neutral, se termina premiando al opresor», dijo, citando a Desmond Tutu. «Yo espero que en los próximos días el cerco diplomático continúe, y que lo que han planteado como un acompañamiento sea para lograr unas elecciones libres y transparentes», agregó.

La de hoy será la segunda gran manifestación organizada por la oposición venezolana, que durante la semana ha convocado protestas puntuales o actos públicos con los diputados y con el propio Guaidó. Dado que el Gobierno ha impuesto la censura, la convocatoria se realizó por redes sociales y Whatsapp.

En paralelo, el chavismo transmitió por la televisión pública cómo Nicolás Maduro presenciaba ejercicios militares de cómo la Guardia Nacional se prepara para responder a manifestaciones opositoras, con equipos blindados «artillados con ametralladoras», «fusiles de asalto AK-103» y hasta francotiradores. «Una vez anuladas o abatidas las amenazas se toma control del territorio en disputa», decía la narración.

Pero la oposición no será la única que salga a las calles. El chavismo llamó a sus militantes a celebrar que se cumplen 20 años desde que Hugo Chávez asumió la presidencia, el 2 de febrero de 1999. Así comenzará una semana fundamental para el Gobierno interino, que debe mostrar que avanza para lograr sus objetivos de acabar con la usurpación de Maduro, liderar un gobierno de transición y convocar elecciones. Especialmente si la Unión Europea no le reconoce legitimidad, y se impone un camino de «diálogo político» interno, como defienden México, Uruguay, algunos países europeos y hasta Rusia, aliado político de Maduro.

Si Europa no le brinda reconocimiento a Guaidó, será complicado que el Fondo Monetario Internacional permita que la oposición designe un gobernador ante ese organismo, clave en la restauración económica, según el propio «Plan país» presentado el jueves en Caracas por Guaidó. El FMI ha dicho que se guiará por la comunidad internacional a la hora de reconocer oficialmente a un gobierno interino en Venezuela, según afirmó Gerry Rice, portavoz del organismo.

Esta semana Guaidó podría confirmar cuándo va a nombrar una nueva directiva en la petrolera Citgo, ubicada en Estados Unidos, filial de la estatal Petróleos de Venezuela. También, cuándo nombrará un representante de su Ejecutivo ante el Banco Interamericano de Desarrollo, que ya le brindó reconocimiento, y ante el cual Venezuela está en deuda.

Por otra parte, será la semana también para materializar la ayuda humanitaria prometida desde Estados Unidos, así como el anuncio –que se espera ocurra este mañana– de cómo se introducirán esos envíos a Venezuela. Las fronteras están protegicas por el Ejército y la Guardia Nacional, leales a Maduro, y ya desde el oficialismo se ha calificado a la ayuda humanitaria como una «limosna» que busca abrir caminos para una intervención militar en Venezuela.

Hasta ahora, el Gobierno interino que encabeza Guaidó desde el Parlamento tiene poco que mostrar en lo institucional. Nombró «representantes» diplomáticos –no embajadores– ante países que reconocen su autoridad: Estados Unidos, Colombia, Argentina, Canadá, Chile, Ecuador, Honduras, Panamá, Perú y el Grupo de Lima.

Son países donde el régimen de Nicolás Maduro no tenía embajador sino encargado de negocios, en el mejor de los casos. Ninguno de los nombrados por la Asamblea Nacional ocupa aún las sedes de las embajadas. Han optado por operar en otros espacios, pues «ya llegará el momento de tocar esa puerta y sentarse en esos despachos», explicó un diputado a LA RAZÓN.

No ha habido nombramiento de ministros. «Pero tenemos venezolanos excelentes y preparados para asumir esos roles cuando llegue el momento», dijo Guaidó en una entrevista co este periódico el pasado día 25. Saben que un nombramiento temprano puede conducir a prisión a quien sea designado, como ya pasó con los magistrados del Tribunal Supremo, que nombró el Legislativo en 2017, que terminaron exiliados y dos de ellos encarcelados por «usurpación».

Son todas tareas que se basarán en el Estatuto que rige la transición a la democracia para reestablecer la vigencia de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que discute la Asamblea Nacional y debe ser aprobado definitivamente para luego ser publicado en Gaceta Oficial –en este caso una Gaceta Parlamentaria pues la otra está controlada por la burocracia chavista–. Esa norma detalla cómo será la transición, cómo conformar un Gobierno provisional y cuáles son los criterios para designar titulares de los otros poderes públicos.