Ucrania

El jefe de la inteligencia militar de Ucrania: "La situación está al borde del abismo"

Kirilo Budanov asegura que Rusia va a iniciar una nueva ofensiva en el norte para tratar de conquistar la ciudad de Sumy

El jefe de la inteligencia ucraniana Budanov
El jefe de la inteligencia ucraniana BudanovArmyinform

"La situación está al borde del abismo". Esta es la terrible descripción que ha hecho Kirilo Budanov, jefe de la agencia de Inteligencia Militar (GUR) en un mensaje de vídeo grabado desde el interior de un búnker en la región de Járkov, asediada estos días por el Ejército ruso, que ha desplegado 30.000 efectivos para tomar la ciudad. "Cada hora la situación se acerca al punto crítico", añadió el teniente general

Según Budanov, la causa de este escenario está en la grave falta de armas, especialmente municiones de artillería. Ucrania está a la espera de que comiencen a llegar armas de un nuevo paquete aprobado por Estados Unidos por valor de 60.000 millones de dólares. Según el jefe de la inteligencia militar, los ataques rusos en el noreste del país tienen como objetivo agotar las reservas de los soldados ucranianos y distraerlos para dejar desprotegidas otras regiones.

"Todas nuestras fuerzas están aquí o en Chasiv Yar", dijo el jefe del GUR, refiriéndose al bastión ucraniano situado a unos 190 kilómetros al sur. "Usé todo lo que tenemos. Lamentablemente no tenemos a nadie más en reserva", añadió.

El alto mando militar espera que las tropas ucranianas puedan fortalecer sus posiciones durante los próximos días, pero avanzó que Rusia lanzará una nueva ofensiva más al norte de Járkov, en la región de Sumy.

Las pérdidas de Ucrania en las últimas horas

El Ministerio de Defensa de Rusia ha revelado en las últimas horas que las fuerzas antiaérea derribaron un caza Su-27, 33 drones, seis misiles tácticos Tochka-U, 39 proyectiles de los sistemas lanzacohetes múltiple Himars de fabricación estadounidense y Vampire de producción checa, cinco bombas guiadas Hammer de fabricación francesa, cuatro misiles Storm Shadow de producción británica y cinco misiles HARM de fabricación estadounidense.

Además, las tropas rusas destruyeron un tanque Leopard de producción alemana y varios obuses de fabricación italiana, estadounidense, británica, checa y croata. En total, Kiev perdió hasta 1.455 soldados, según el aparato de propaganda ruso.