Fuerza aérea

Un tribunal neerlandés ordena detener las exportaciones de piezas de aviones F-35 a Israel

El Gobierno saliente de Rutte anuncia que recurrirá la decisión en mitad de la visita oficial del primer ministro a Israel

Jerusalem (Ó-), 12/02/2024.- Dutch Prime Minister Mark Rutte (L) and Israeli Prime Minister Benjamin Netanyahu chat prior to their meeting at the prime minister's office in Jerusalem, 12 February 2024. Rutte is on an official visit to Jerusalem and is scheduled to visit the West Bank city of Ramallah later in the day. (Países Bajos; Holanda, Jerusalén, Ramala) EFE/EPA/ABIR SULTAN
Dutch Prime Minister Rutte visits JerusalemABIR SULTANAgencia EFE

Países Bajos deberá detener en un plazo de siete días las exportaciones de piezas de aviones de combate F-35 a Israel por la elevada probabilidad de que el material sea utilice para cometer violaciones del derecho internacional en el marco de la guerra contra Hamás en la Franja de Gaza, donde han muerto desde octubre más de 30.000 personas como consecuencia de los ataques israelíes, según el recuento actualizado del Ministerio de Sanidad gazatí. Así lo ha decidido este lunes el Tribunal de Apelación de La Haya al considerar que existe un «riesgo claro» de que Israel viole el derecho internacional humanitario, un extremo que el Ejecutivo hebreo rechaza de plano. «Israel no tiene suficientemente en cuenta las consecuencias para la población civil cuando lleva a cabo sus ataques», recoge el tribunal en su escrito.

En diciembre, tres organizaciones de la sociedad civil, Oxfam Novib, PAX y The Rights Forum, presentaron la denuncia alegando que los envíos violaban las normas europeas y el tratado de la ONU sobre el comercio de armas. Buscaban detener los envíos de piezas para el caza de fabricación estadounidense de última generación utilizado por Israel; piezas almacenadas en la base militar neerlandesa de Woensdrecht. Desde el centro logístico de esta localidad, Países Bajos exporta materiales de repuesto a todos los países europeos que forman parte del programa F-35 que dirige Estados Unidos, entre los que figura Israel. En 2022, el Estado judío recibió piezas por valor de 2,3 millones de euros procedentes del centro de Woensdrecht.

Países Bajos no detuvo las exportaciones tras el estallido de la guerra en Gaza. El Gobierno del primer ministro saliente Mark Rutte prorrogó en noviembre la licencia de exportación pese a las tímidas advertencias formuladas semanas antes por un grupo de funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores a Liesje Schreinemacher, entonces titular de la cartera. Sugerían a la ministra a través de una nota interna que estudiara la posibilidad de detener las exportaciones a Israel por la probable comisión de «graves violaciones del derecho humanitario de guerra». Pero los envíos de piezas han continuado hasta la fecha.

Un tribunal de primera instancia dictaminó durante las primeras semanas de guerra en Gaza que las exportaciones eran ante todo una decisión política en la que los jueces no deberían intervenir. Sin embargo, la corte reconocía en ese mismo pronunciamiento que los cazas F-35 podrían contribuir a la violación del derecho internacional en la Franja por parte de Israel. En un caso paralelo, la Corte Internacional de Justicia de La Haya ya ordenó expresamente a las autoridades israelíes que tomaran medidas preventivas para evitar «actos genocidas» en Gaza.

Kati Piri, diputada de la coalición de ecologistas y laboristas, PvdA-GroenLinks, ha celebrado el fallo. «Firme tirón de orejas al Gabinete por no tener en cuenta este riesgo», ha escrito en su cuenta de X. Sin embargo, el Gobierno de Rutte ha confirmado que apelará la decisión en los tribunales porque, en palabras del ministro de Comercio Exterior, Geoffrey van Leeuwen, corresponde al Estado «determinar su política exterior». «Tenemos acuerdos con otros países sobre la distribución de F-35, y Holanda debe seguir siendo un socio fiable. E Israel necesita los aviones F-35 para defenderse de las amenazas procedentes de la región, aparte de Gaza», ha subrayado en X.

El pronunciamiento del Tribunal de Apelación de La Haya ha coincidido con la tercera visita de Rutte a Israel desde que estallara la guerra en Gaza. El todavía primer ministro, en las quinielas para reemplazar a Jens Stoltenberg como secretario general de la OTAN, ha iniciado una gira regional que le conducirá en las próximas horas por los Territorios Palestinos Ocupados y Arabia Saudí. El liberal se ha reunido con su homólogo israelí, Benjamín Netanyahu, para convencerle de la necesidad de un alto el fuego en Gaza. Sin embargo, Netanyahu ha insistido en que antes debe finalizar la operación militar en Rafah y conseguir «la victoria total sobre Hamás».