Misterio en torno al niño ahogado que apareció atado a una piedra en el Danubio

El cuerpo del niño descubierto en el Danubio hace más de un año sigue desconcertando a la policía. La reconstrucción de la cabeza no ha producido los avances deseados. Por eso, Interpol ha enviado a los 195 países miembros de la organización policial una alerta para tratar de poner nombre al cuerpo del menor, de unos 5 o 6 años, que apareció en el Danubio a su paso por Alemania hundido con una losa de piedra.

El cadáver de este niño de pelo castaño y de grupo sanguíneo 0, que medía unos 110 centímetros y pesaba 15 kilos, fue encontrado en el fondo del río cerca de la localidad de Grossmehring, en Baviera, envuelto en aluminio, indicó Interpol este martes en un comunicado.

Mediante la apertura del proceso iniciado con la difusión de la "nota negra", una alerta para buscar informaciones sobre cuerpos pendientes de identificación, la agencia policial internacional ha comunicado también algunos detalles, incluida una reconstrucción de la cara, con una imagen de frente y otra de perfil.

Detrás de esta operación internacional está el hecho de que los investigadores creen que el niño pasó tiempo fuera de Alemania.

El secretario general de Interpol, Jürgen Stock, destacó que "alguien en algún lugar sabe algo sobre este chico, por lo que es igualmente importante hacer públicos ciertos detalles".

"Tanto si fue víctima de trata como de secuestro o violencia, estamos decididos a movilizar todas las capacidades policiales de Interpol para identificarlo y ayudar a los investigadores a arrojar luz sobre su muerte".

La consigna es que cualquier persona que recuerde a un niño desaparecido con características que puedan tener relación con este caso se ponga en contacto con el equipo de la policía alemana encargada del caso.

Desde 2021, la agencia policial internacional pone a disposición de los investigadores una base de datos denominada I-Familia para ayudar a identificar cadáveres desconocidos mediante la comparación de ADN.

En mayo de este año, también puso en marcha el programa Identify Me para tratar de poner nombre a 22 mujeres supuestamente víctimas de asesinato de las que no se conoce la identidad. Desde entonces se han recibido más de 500 mensajes y pistas.