El misterioso asesinato de dos bomberos en un bosque de Idaho conmociona a EEUU

Todavía no hay respuestas claras, pero lo que pasó este domingo en Canfield Mountain, en el estado de Idaho (EEUU), dejó a toda la comunidad temblando. Un incendio forestal, un tirador escondido entre los árboles, dos bomberos muertos y uno más luchando por su vida. ¿Qué pasó realmente en el bosque?

Eran la 1:30 de la tarde cuando se desataron las alarmas en Canfield Mountain, un destino popular para los amantes de la naturaleza. Un incendio más como los que suelen ser habituales a principios del verano en el estado de Idaho, en Estados Unidos. Media hora después las radios de los bomberos empezaron a sonar: “Todos estamos heridos... manden refuerzos ya”. Era el mensaje de SOS de los bomberos que se habían acercado para sofocar las llamas.

Según el sheriff del condado, Bob Norris, un hombre armado con un rifle había comenzado a disparar a los bomberos. El atacante se había posicionado estratégicamente en la montaña, escondido entre los árboles, desde donde esperaba la llegada de los agentes para disparar. “Fue una emboscada”, comentó el sheriff, que añadió que los disparos durante la emboscada parecían provenir de al menos un "rifle de alta potencia". “No tuvieron ninguna oportunidad”. Todas las hipótesis apuntan a que fue un incendio provocado por el tirador. Las autoridades enviaron refuerzos. En un momento de la operación, el sospechoso llegó a enfrentarse a cerca de 300 agentes en medio de un tiroteo en el que también participaron dos helicópteros con francotiradores a bordo.

Durante a noche, "miembros de un escuadrón SWAT localizaron a un hombre muerto en la montaña Canfield", dijo el sheriff, quien agregó que "se encontró un arma de fuego cerca". Norris dijo a la prensa en la tarde que las autoridades se habían enfrentado a tiros cuando el incendio seguía activo en la zona montañosa de esa localidad. Dos bomberos murieron por heridas de bala y un tercero fue trasladado con heridas al hospital para una cirugía. "Está luchando por su vida pero su condición es estable", sostuvo Norris.

El sheriff de Kootenai dijo que las autoridades sospechan que el incendio fue "intencional". "Creemos que el sospechoso inició el fuego y que fue una emboscada", declaró Norris. Los agentes encontraron un cuerpo más tarde, cuando las llamas estaban cerca, gracias a un rastreo con los datos del móvil. El tirador tenía un arma cerca, pero aún se desconoce su nombre y qué tipo de arma usó. Tampoco han dicho si tenía algún motivo, ni de dónde venía. Solo que estaba solo.

El gobernador Brad Little calificó lo sucedido como un ataque “atroz” contra quienes arriesgan su vida por protegernos. Mientras los equipos federales del FBI se suman a la investigación, los vecinos de Idaho siguen tratando de entender qué fue lo que pasó.

Las autoridades levantaron la orden de quedarse en casa, pero pidieron precaución porque el fuego seguía activo en algunos sectores. Algunos vecinos dijeron que escucharon disparos antes de ver el humo.