Muere por falta de atención médica un ciudadano irano-estadounidense en la prisión de Evin

Irán no reconoce la muerte por falta de atención médica de Faramarz Javidzad, un ciudadano de origen judío con doble nacionalidad irano-estadounidense de 60 años encarcelado en el «infierno» de Evin, la prisión de Teherán en la que están retenidos en condiciones inhumanas decenas de disidentes de la República Islámica.

Javidzad no llegó a ser trasladado a un hospital el pasado viernes tras sufrir una hemorragia estomacal, según la BBC. Murió el sábado en prisión por falta de atención médica.

La versión oficial es distinta. El departamento de prisiones de la provincia de Teherán sostiene que Javidzad había sido tratado hasta en cinco ocasiones a causa de sus problemas digestivos durante los dos meses que permaneció en prisión por delitos financieros. Recibió hace unas semanas el alta médica «por su propia insistencia», recoge la agencia estatal de noticias Mizan.

Pero el sábado su salud empeoró. Ya en el hospital, los médicos y enfermeras le practicaron la reanimación cardiopulmonar, sin éxito. Es el relato de los hechos del departamento de prisiones, que choca frontalmente con la información a la que ha tenido acceso la BBC.

La Administración Biden dice estar al tanto de lo sucedido. «Somos conscientes de los informes de la muerte de un individuo en una prisión iraní y estamos buscando información adicional», trasladó a la cadena británica un portavoz del Departamento de Estado, que no reveló la identidad del reo en cuestión.

La noticia ha trascendido una semana después del intercambio de prisioneros acordado por Washington y Teherán. Las autoridades iraníes liberaron a cinco ciudadanos con doble nacionalidad que habían sido «detenidos injustamente», según el Departamento de Estado. Pero Javidzad no figuraba en la lista al no ser considerado un preso político.

Como parte del acuerdo, Estados Unidos liberó 6.000 millones de dólares de fondos iraníes congelados en Corea del Sur, un montante que ingresó en bancos de Qatar para realizar gastos con fines humanitarios.