Política

Terrorismo yihadista

No hay plan tras la caída de Baguz

No hay plan tras la caída de Baguz
No hay plan tras la caída de Baguzlarazon

¿Qué pasará ahora con todos los yihadistas retenidos en Siria?

Las Fuerzas de Siria Democrática, la facción kurda apoyada por Estados Unidos, han estado luchando contra el Estado Islámico desde hace años. Y el último esfuerzo ha sido para lograr la caída de Al Baguz. Pero el plan para el día después quizá sea peor que la propia guerra ya que no lo hay. Ahora mismo existen 1.300 detenidos en los campos de concentración construidos por los kurdos a la espera de un cambio en la mentalidad de sus hogares, pues los países de los que proceden (Francia, Reino Unido, Bélgica, Túnez, ...) intentan hacer oídos sordos. Solo Irak y Marruecos están repatriando a sus nacionales del califato, los que tendrán que hacer frente al sistema judicial y carcelario a partir de ahora.

¿Volverá el Estado Islámico? ¿O estamos presenciando su fin?

El Estado Islámico se creo a raíz de la brutalidad que los gobiernos de Oriente Medio desataron para reprimir a su sociedad, que pedía un giro hacia la democracia y un cambio en la situación de unos pueblos previamente hundidos en lo económico y lo social. De esta forma, la retórica de este grupo terrorista caló en la mente de las miles de personas desoladas por las malas condiciones de vida, así como en las pocas expectativas de un futuro mejor. Así, el califato extrapoló la idea de que iba a reconstruir la dignidad y la autoestima de los musulmanes de todo el mundo. Les dio un motivo por el que luchar. Y esas razones aún siguen vivas en la mente de muchas personas. Y si persisten no hay duda de que, de un modo u otro, el califato volverá. A todo esto, la no posibilidad de volver a sus hogares de origen no ayuda a eliminar esas ideas sino, más bien, las retroalimenta.

¿Cuál será el siguiente paso? ¿Hay posibilidad para una paz?

Es difícil prever si el siguiente paso en suelo sirio se va a dar en forma de paz. Existen varios componentes. Primero, tenemos a Trump que decidió salir de Siria dejando a su suerte a las fuerzas kurdas que están amenazadas por Turquía. Los turcos, a su vez, son aliados fundamentales de Rusia y, en cierta medida, de Irán en su labor por apoyar y mantener el régimen de Bachar al Asad. Y, por último, Naciones Unidas, que es incapaz de ofrecer una solución clara a dicho conflicto. Lo más probable es que el final no va a traer una paz. Sino más bien ofrecerá a Siria al mejor postor, el cual pueda presentar una solución que contemple a todas las partes implicadas.