Suecia ya contempla ingresar en la OTAN en abril de 2024

Relegada a ser el único país nórdico que no forma parte de la OTAN tras el ingreso de Finlandia en abril, Suecia parece resignarse a que su accidentado proceso de adhesión se prolongue un año más, hasta la Cumbre de Washington de abril de 2024, cuando los 31 aliados celebrarán el 75º aniversario de la organización militar, informa el diario sueco "Dagens Nyheter". Oficialmente, sin embargo, el ministro de Defensa, Tobias Billström, reitera que "el objetivo sigue siendo que Suecia se convierta en miembro para la cumbre de Vilna", que se celebra en al la capital de Lituania el 11 y 12 de julio.

Para la próxima primavera, confían las autoridades suecas, tanto Turquía como Hungría, los dos únicos Estados que aún no han dado aún luz verde al ingreso de Estocolmo en la organización militar, ratifiquen el ansiado tratado de adhesión. Eso sí, ni Recep Tayyip Erdogan ni Viktor Orban darán su brazo a torcer sin concesiones.

La probable reelección del líder turco en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales que se celebran este domingo suponen otra ducha de agua fría para Estocolmo, que veía una ventana de oportunidad en la elección del líder opositor, el socialdemócrata Kemal Kiliçdaroglu, que promete un acercamiento de Ankara a sus tradicionales socios europeos en caso de llegar al poder.

En opinión de Michael Claesson, jefe del Estado Mayor sueco, abril de 2024 es una fecha "razonable desde un punto de vista estratégico-militar". Sin embargo, fuente militares también advierten de que permanecer más tiempo fuera del paraguas de la OTAN puede suponer un mayor riesgo para la seguridad sueca, dado que será más difícil cooperar con una Finlandia cada vez más integrada en las estructuras militares trasatlánticas.

El viento que sopla desde Budapest tampoco parece muy favorable a los intereses del país nórdicos. Este martes Orban aseguraba desde el Foro Económico de Qatar que las relaciones entre Hungría y Suecia "son terriblemente malas". "No queremos importar conflictos a la OTAN", justificó el jefe de Gobierno de Hungría, cuyo Parlamento ratificó solo en marzo la adhesión finlandesa a la Alianza Atlántica.

Haciendo oídos sordos del nuevo bofetón de Orban, el secretario general de la OTAN, Jen Stoltenberg, manifiesta su esperanza en que el ingreso sueco concluya "lo más rápido posible. "Recomiendo que todos los Estados miembros ratifiquen la solicitud de Suecia para la OTAN", aseguró a la prensa tras participar en la reunión de ministro de Defensa de la UE celebrada en Bruselas. "Estoy completamente seguro de que Suecia se convertirá en miembro de la OTAN. Trabajaré tan duro como pueda para que esto suceda lo antes posible", añadió el político noruego.

El secretario general de la organización militar alude a tres argumentos para justificar su optimismo: la reanudación de las sesiones del Parlamento turco tras las elecciones presidenciales y legislativas; la entrada en vigor de la nueva ley antiterrorista sueca el 1 de junio; ya la Cumbre de Vilna de julio, que dará la oportunidad a los líderes de la OTAN de discutir el problema cara a a cara. "No es una garantía, pero es una posibilidad", asegura Stoltenberg.

Por su parte, el ministro de Defensa sueco, Pål Jonson, eludió responder a las palabras de Orban para hacer hincapié que "en el área militar tenemos una buena cooperación con Hungría y tiene que ver con el hecho de que ambos operamos el Gripen." "Todavía tenemos la esperanza de poder convertirnos en miembros de pleno derecho para la cumbre de la OTAN en Vilnius. Pero, por supuesto, sólo Hungría puede tomar decisiones húngaras", añade Jonson.