EE UU
Los EE UU que Trump ha creado en sus primeros seis meses de gobierno
El republicano llega al ecuador de su primer año de mandato con la aprobación de su ley estrella, la bautizada como 'One Big Beautiful Bill'
En las calles de Washington D. C., los ciudadanos se dividen entre quienes con orgullo celebraban este 4 de julio la fiesta de la independencia -la celebración más importante del año-, y entre quienes ven en esta oportunidad esa fecha como un recordatorio de los "caóticos" primeros seis meses de la presidencia de Donald Trump. El mandatario republicano fue electo en unos comicios históricos que le dieron una legitimidad en votos mayor a la de ningún otro líder republicano en los últimos veinte años, irrumpiendo el statu quo en el país, quizá, para largo tiempo.
Su llegada, como era de esperarse, ha supuesto en estos primeros seis años el desmantelamiento de las formas tradicionales de navegarse en la Casa Blanca, lo que ha aumentado los niveles de polarización en el país frente a una figura ya tan divisoria como la suya. La aprobación promedio de Trump se mantiene estable en medio de un momento crucial de su segundo mandato: la aprobación de su ley estrella, conocida como "One Big Beautiful Bill", que tras maratónicas votaciones en el Senado y la Cámara de Representantes logró ser conseguirse en vísperas del feriado del 4 de julio, una fecha que había sido autoimpuesta por el mandatario a su partido.
Un promedio de encuestas recientes recopiladas por The New York Times muestra que la aprobación de Trump es del 44% a miércoles 2 de julio, mientras que la desaprobación de su gestión llega al 52%. Básicamente, estos números son los mismos que ha tenido durante los primeros meses de su mandato, con la aprobación promedio del Times oscilando entre el 44% y el 46%.
166 órdenes ejecutivas, 44 memorandos y 71 proclamaciones
Esta "luna de miel" con sus votantes le ha permitido llevar a cabo una ola de medidas que han saturado los medios de comunicación. Al 2 de julio, el mandatario había firmado 166 órdenes ejecutivas, 44 memorandos y 71 proclamaciones en su segundo mandato presidencial. Cada tipo de documento presidencial tiene una autoridad e implementación diferentes.
Las órdenes ejecutivas son directivas que el presidente dirige a los funcionarios dentro del poder ejecutivo, exigiéndoles que tomen o detengan alguna acción relacionada con políticas o gestión. Sobre estas han llovido demandas de organizaciones civiles, defensores de minorías, abogados de inmigración y jueces en estados demócratas (opositores), para intentar frenar la avanzada que algunos califican como "autoritaria", porque buscaría -dicen- desarrollar una agenda basada en la fuerza de la Casa Blanca.
Recientemente, la Corte Suprema, de mayoría conservadora, puso la "cereza en el pastel" otorgando en un fallo la victoria a Trump sobre la posibilidad de que sus órdenes no puedan ser automáticamente demandas por cuanto a juez se le ocurra para no "socavar la independencia del poder ejecutivo". El trasfondo de esta disputa es la apuesta del republicano por buscar eliminar el derecho a la ciudadanía por nacimiento, una de sus más agresivas acciones contra la inmigración.
Tres grandes políticas
Pero quizá a nivel doméstico hay tres grandes políticas que encapsulan los últimos seis meses: la puesta en marcha de su llamado plan de deportaciones
masivas de inmigrantes, las negociaciones con aliados y socios para imponer aranceles con la intención de reconfigurar el comercio exterior y la diplomacia transaccional bajo la prevalencia del más fuerte, y la creación de un Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) que tiene la función de recortar los "gastos innecesarios" del gobierno federal hasta su mínimo. Este último fue precedido por el multimillonario Elon Musk, financista de la campaña de Trump, y con quien el mandatario terminó distanciado y en una pelea que promete dar más titulares en los próximos meses.
Sobre inmigración, en los últimos días fue presentado en Florida un centro de detención de inmigrantes indocumentados conocido como "Alligator Alcatraz", porque está ubicado en un área infestada por cocodrilos hambrientos. Trump, orgulloso de su presentación, viajó hasta allá esta semana para mostrarla al mundo y lanzar una amenaza a los inmigrantes: "no vengan, autodepórtense y váyanse o terminarán aquí", dijo.
Es la más reciente causa en esta materia luego de que la policía migratoria, conocida como ICE, avanza redadas en varias ciudades del país perfilando a personas que luzcan hispanas y, según reportes de organizaciones de derechos humanos, saltándose el debido proceso para poder arrestar a la mayor cantidad de inmigrantes indocumentados posible, alimentados por una retórica que los califica de "criminales" a todos, a pesar de que la ley estadounidense no tipifica esa acción como un delito sino como una infracción civil.
Esta situación generó el mes pasado una ola de protestas masivas en Los Ángeles, que supusieron la prueba de popularidad más importante que ha enfrentado Trump hasta el momento. Las manifestaciones pronto se tomaron varias ciudades del país coincidiendo con su cumpleaños número 79, aunque poco a poco fueron desapareciendo.
Números estables, pese a la vorágine comercial
En lo económico, Trump recibe su veredicto de mitad de año con números estables, mientras el caos por una posible guerra comercial con Pekín comienza a disiparse y más países hacen acuerdos con Washington sobre la imposición de aranceles. Recientemente, EE UU ha suavizado las restricciones a las exportaciones hacia China para software de diseño de chips y etano, una señal de que las tensiones comerciales entre ambos países se están calmando.
Con la más reciente victoria legislativa, Trump tiene ahora vía libre para poner a andar una caja financiera que incrementa el presupuesto para que lleve a cabo sus promesas de campaña. Porque todos los analistas, azules o rojos, coinciden en que a pesar de lo caótico de la implementación de sus políticas, no se trata más que de políticas cumplidas.