Moda

Teresa Helbig: “las mujeres podemos con todo”

Entrevistamos a la diseñadora minutos antes de la presentación de su colección para Iberia en la Semana de la Moda de Madrid.

En el desfile de Iberia en Madrid
En el desfile de Iberia en Madridlarazon

“Como mujeres empoderadas y auténticas trabajadoras”, así define la diseñadora Teresa Helbig a sus clientas españolas y extranjeras. La modista, que vistió en 2019 a actrices como Macarena García y Halle Berry, y que ideó el más moderno, sofisticado y corto vestido que hayamos visto llevar a la Reina Letizia, nos recibe entre el trajín del backstage minutos antes de la presentación de su colección de uniformes para Iberia en el cierre de la cuarta jornada de la 71a edición de MBFWMadrid. La diseñadora catalana es la primera mujer que colabora con la aerolínea uniéndose así a grandes nombres como Manuel Pertegaz, Elio Berhanyer o Adolfo Domínguez, entre otros, que también crearon los uniformes para Iberia.

En el desfile de Iberia en Madrid
En el desfile de Iberia en Madridlarazon

Con un mono de punto en negro y crudo, su característico flequillo cortina y cientos de anillos dorados tamaño XL, Teresa Helbig nos saluda cariñosa. Reconoce que esta cansada. Cuatro días de adrenalina y nervios en Cibeles no dan pie a otra cosa. Pero también se muestra ilusionada, satisfecha por lo conseguido en el que, considera, ha sido uno de los mejores años de su carrera profesional. “Las mujeres podemos con todo”, dice “y además vamos depiladas”, bromea.

Por Teresa Helbig
Por Teresa Helbiglarazon

Helbig es la humanización del trabajo y la atención al detalle. Razones por las cuales, Iberia ha confiado en ella para diseñar los uniformes que, seguramente a partir de mayo, vayan a lucir los 6.500 empleados de la aerolínea a bordo de sus aviones y en los aeropuertos en los que opera la compañía. Teresa Helbig define los trajes como diseños “atemporales, funcionales y cómodos”. Nos cuenta que ha tenido el placer de hablar con alguna de las azafatas que los vestirá. “Dio la casualidad en el aeropuerto. Me decían: ‘Teresa, qué bien, qué ganas”, cuenta con la ilusión latente en sus ojos. “Además hemos volado con ellas, hemos hecho pruebas de campo”, relata a modo anecdótico.

“Trabajamos a favor del cuerpo de la mujer con patrones que sabemos que le van a favorecer”, explica la modista, que, ahora, dice ser plenamente consciente de lo sacrificado que es el trabajo de las azafatas. Hace alusión a las condiciones climáticas, al esfuerzo que supone subir y bajar escaleras y estar sometidas a cambios constantes de presión atmosférica con la hinchazón corporal que eso supone, por eso, nos chiva, las faldas y pantalones que ha confeccionado tienen una cremallera oculta que permite ganar una talla. “Lo hemos pensado todo”, afirma. Y en este sentido, le preguntamos por la edad de las modelos que, minutos más tarde de nuestra conversación, llevaron los uniformes sobre la pasarela. “Desfilarán modelos de todas las edades, Teresa”, le decimos. “Sí, claro”, nos responde. “Antiguamente las azafatas tenían que tener ciertas medidas, ahora, afortunadamente, no es así”, cuenta en un respiro.

Por Teresa Helbig
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El amor que pone la diseñadora a su trabajo no solo emana de sus palabras sino que además, tras el desfile, que arrancó con un cante jondo a la guitarra, se reflejó en el cálido aplauso del público, fascinado por los 30 estilismos de hombre y mujer que se presentaron. Vestidos, faldas, pantalones, blusas, camisas, abrigos, bolsos, guantes, vestidos de premamá, cárdigans, blazers, chalecos, bufandas, jerseys de punto, polos o corbatas que encarnan vanguardia, proximidad, vitalidad, excelencia y vocación de servicio. Prendas que rinden homenaje a lo reto, huyen de lo rígido y buscan ser cómplices de los movimientos de la mujer. En la propuesta predominan los tonos azules, rojos, amarillos y crudos. Y todo se conjuga en una línea muy “Helbig Gang”.

La diseñadora junto a sus bocetos.
La diseñadora junto a sus bocetos.larazon

Helbig está contenta con el trabajo realizado y agradecida para con su equipo. A 2020 le pide seguir creciendo. “Seguir con el proceso de internacionalización, seguir trabajando en nuestro punto de venta en Los Ángeles, hacer diseños de alfombra roja y cuidar a nuestras clientas, que son lo más importante”, dice la diseñadora. Y preguntada, en este último sentido, por si las extranjeras son más exigentes que las españolas, nos da un rotundo no. “Nosotros somos tan exigentes con nosotros mismos que no es necesario que ellas lo sean. Hablamos el mismo idioma”, confirma la catalana.

Autoexigencia y perfeccionismo se denotan también en sus diseños nupciales. A las novias de 2020 Teresa Helbig les manda un mensaje: que sean fieles a si mismas, que no pasen desapercibidas, que busquen algo atemporal para que, al cabo de 20 años, al recuperar las fotos del gran día, se sigan viendo a ellas mismas. Tan cómodas como pudieran sentirse ataviadas con alguna de las prendas que, dicho sea de paso, no faltan en el armario de Helbig. Nos referimos al vestido, la bomber, por su “punto canalla” y el kimono. Tres must haves que la diseñadora considera claves en el street style. Nada se le escapa. Bueno, quizá una cosa sí. Una sonrisa perenne con la que se despide de nosotras. Una cercanía en el trato que explica gran parte de su exitazo. Gracias y enhorabuena, Teresa.