Entrevista

Pol 3.14: “Cantar ‘Jóvenes eternamente’ en la boda de María Pombo fue como sonar 10 años seguidos en la radio”

Charlamos con Joaquín Polvorinos, vocalista de Pol 3.14, sobre su nuevo single y sus más de diez años de carrera.

Pol 3.14 actuando en un festival.
Pol 3.14 actuando en un festival.@pol314oficial

Pasen los años que pasen siempre nos sentiremos ‘Jovénes eternamente’, cantando a todo pulmón este himno de nuestra juventud. Hay canciones que llegan para quedarse, otras que son como estrellas fugaces y luego está ese grupo de canciones elegidas que nos impactan como un rayo y se quedan siempre en nuestra memoria. Son esas que llamamos las bandas sonoras de nuestra vida. Ese pequeño grupo de elegidas que siempre nos recordaran a un momento que nos ha marcado para siempre. Y eso es lo que pasa con las canciones de Pol 3.14, que llegaron para quedarse para siempre en ese rincón de nuestro cerebro que en ‘Inside Out’ llamarían el rinconcito de las emociones ordenadas.

‘Bipolar’ o ‘Jóvenes eternamente’ nos han hecho saltar de emoción, llorar, dejarnos la voz y sentirnos vivos. Y siempre estaremos agradecidos por ello. Hace diez años que todo el país cantaba eso de...Y sin dudar, tú me plantas un beso... y ahora Pol 3.14 vuelve a estar en boca de todos tras el lanzamiento de su nuevo single, ‘Amor intermitente’ donde habla de la soledad de los cantantes sin el público en este año de pandemia. De cómo esta vida incierta llena de altibajos puede engancharnos para siempre. Así como nos ha pasado con sus canciones.

Justo un año después de que empezará todo, ¿cómo estás? Que eso aún sigue siendo lo más importante.

Más animadete, con conciertos y cositas que van saliendo, así que un año mejor. Más viejo, pero mejor (risas).

(Risas) Bueno, mientras sea mejor nos podemos dar pos satisfechos. Y hablando de pandemia, ‘Amor intermitente’. Tu último single que habla de esta incertidumbre que estamos viviendo.

Efectivamente, por ahí van los tiros. Era jugar con el doble sentido de ese amor que todos más o menos conocemos entre dos personas y ese amor que todos los artistas tenemos por el escenario y que hemos sufrido esa intermitencia. Buena desaparición completamente primero y luego intermitencia de ahora sí, ahora no, ahora estos aforos... Eso sufrimiento que estamos viviendo y como los artistas no podemos vivir sin el escenario. Una vez que uno lo prueba ya no puede vivir sin eso.

Un tema entonces que ha surgido totalmente ya en esta mal llamada ‘nueva normalidad’.

Absolutamente. Es un tema ‘pandemico’ totalmente. No durante el confinamiento extremo, pero después del verano. Ahí estaba yo un poco sufriendo como todos. Este tema me vino de golpe, me gustó la melodía y me apetecía hablar de este tema. Soy bastante currante y cada día hago un poco. Con esto de la pandemia me he quedado como sin memoria y a partir de ahí surgió el tema.

Compañeros tuyos nos han dicho en los últimos meses que con esta situación les cuesta más componer, sin poder viajar. ¿A ti te está afectando?

La verdad es que no, a ver todo lo que hago no es bueno evidentemente y he tenido mis momentos peores y mejores. Pero no me hace falta viajar, leo mucho y como Julio Verne que no salió de su pueblo y mira la que lió (risas). Pues soy un poco así.

Pero estas ultimas semanas has podido volver a salir y subirte de nuevo al escenario. ¿Cómo está siendo de nuevo esa sensación?

Es distinto. Es una situación que nadie había vivido, con las mascarillas que es un coñazo, las salas tiene que montar un cristo. Con todo eso te subes al escenario con la emoción a flor de piel, todos estamos más emocionados. Nos han quitado muchas cosas y con lo que nos den lo vivimos a tope. Aunque parezca pedante o empalagoso dar tantas veces las gracias, no lo puedo evitar. Tener conciertos ahora es un bien de lujo.

Esa emoción a flor de piel, ¿es más fácil conectar ahora con el público?

Estamos todos en el modo de disfrutar. No sabemos que pasará mañana, no sabemos si habrá otro concierto. Hemos aprendido que la vida son instantes que no sabemos que pasará mañana. No existe nada más que el aquí y el ahora. Se transmite de otra manera, noto que la gente disfruta mucho.

El otro día te escuché una frase y me la apunté porque me hizo reflexionar: “la vida incierta que estamos viviendo, llena de altibajos, puede llegar a engancharnos”.

Luego me quedé pensativo con esa frase. Engancha pero también cansa tanta incertidumbre todo el día. Acaba agotando. Me refería a esas relaciones tormentosas que pueden llegar a enganchar. Todos hemos vivido ese amor que eres tu el que vas detrás y haces un poco lo que te dicen, no sé a mi me ha pasado (risas). El que menos enganchado está es el que tiene la batuta y eso se nota. Con la música estás enganchado y eso es lo que pasa ahora. Al menos en mi situación, que no soy Alejandro Sanz que puedo estar en mi casa sin hacer nada. Yo vivo de los conciertos y tengo que tocar.

Hablando de relaciones tormentosas, te ha pasado muchas veces que alguien se te acerque y te diga que gracias a tus letras ha dejado una relación o se ha enamorado.

(Risas) Me han llegado historias de todo tipo, desde uno que perdió la virginidad con mi primer disco... Me ha pasado de todo. Es lo bonito de la creación, ayudar a la gente en momentos malos o buenos. De pedir matrimonio con ‘Jóvenes Eternamente’...

Incluso ir a cantarla a la boda de María Pombo y convertir esa actuación en viral...

Ese momento fue como sonar en ‘Los 40 principales’ 10 años. Lo de María Pombo fue increíble, me lo pasé genial. No sabía la repercusión que iba a tener pero se viralizó y hoy en día sigue vivo.

¿Era la primera vez que cantabas en una boda?

No la primera, pero muy pocas. Había ido alguna vez de sorpresa, dos creo, a una boda a cantar ‘Jóvenes eternamente’ también.

Y hablando sonar 10 años, justo en medio de esa locura de 2020, Pol 3.14 cumplió 10 años y lo celebrasteis con esa edición especial de ‘Bipolar’ con Cepeda.

Para mi es una canción muy especial, es con la que empezó todo. La colaboración con Cepeda surgió de una manera muy natural y la verdad es que el resultado muy mejor de lo esperado. Cepeda tiene un fenómeno fan alucinante, yo lo desconocía y aluciné (risas). Mundo Cepeda y el resultado ha quedado una canción de puta madre.

Y es lo bonito, cuando surge una colaboración de manera natural y no de una imposición de discográficas...

Y ese es el recuerdo bonito que vas a tener luego, más allá del resultado y de las visitas. Cepeda es un tío estupendo, no es nada estrellita, han sido todo facilidades, se ha volcado y era aún más meticuloso él que yo grabando las voces. Es un currante nato y me alegro que le vaya bien porque se lo merece. Tiene un talento brutal, ojito con Cepeda que va a dar mucha más guerra aún.

Él decía que vuestras canciones nunca caducan y tiene toda la razón, porque sois la banda sonora de toda una generación...

Totalmente. Y me he dado cuenta mucho tiempo después. El arte se ve con perspectiva mirando atrás. Uno no sabe lo que ha hecho hasta que pasa un cierto tiempo. Y habiendo sonado muy poco en radio, porque ‘Bipolar’ ha sonado muy poco. No ha sido un Pereza o un Dani Martín, y la gente se ha quedado con esas canciones. No sé el motivo pero es muy bonito. En mis conciertos veo gente desde 18 hasta 40 años. ¡Qué bien y que bonito que pase esto! Crear tres himnos que se queden para siempre en la historia de la música española me emociona. Y pienso, joder, pues algo bien habré hecho en la vida (risas).

Y además son esas canciones que nos transportan a los conciertos...

Sí. En mi carrera ha habido altibajos, he tenidos momentos complicados pero esos tres himnos siempre los cantaban la gente en directo. Ya fueran 80 personas o 200. ‘Jóvenes eternamente’ emociona siempre a la gente, gente llorando cantándola. Me emociona mucho tocarlas en directo.

Y no solo canciones, tus libros y las frases de tu Instagram que arrasan...

Eso sí que me sorprende (risas). La música siempre me he querido dedicar, pero esto me sorprende mucho. Yo también estudié periodismo, me gusta escribir y estas frases eran como un desahogo diario. Me ha pasado esto, pues voy a escribirlo. Era un reto diario sin buscar nada, porque no era ni consciente de los me gusta. Y ahora veo mis frases en muchos perfiles de gente mediática y famosa. No quise ir a lo fácil y escribir un libro de frases. Pienso repetir seguro. Mi sueño es ser escribir mis libros en frente del mar y vivir de ello.