
Hablan los expertos
Tu rutina facial se queda corta si no incluyes cuello, escote y orejas y esto es lo que pasa si los olvidas
Porque el secreto de una piel joven y luminosa va más allá de tu cara

Lo has oído mil veces: limpia, hidrata, protege. Pero, ¿realmente sabes hasta dónde llega tu cara? Si tu rutina de cuidado termina justo en la mandíbula, tenemos una noticia que cambiará tu perspectiva beauty: tu rostro es mucho más grande de lo que crees. Las orejas, el cuello, el escote y hasta la línea del nacimiento del cabello forman parte de esa “zona facial extendida” que, si no se trata con la misma dedicación que el resto, revela el paso del tiempo antes de lo esperado.
Raquel González, cosmetóloga y fundadora de Byoode, lo deja claro: 'Es sorprendente cómo la zona del nacimiento del pelo, las orejas, el cuello y el escote suelen caer en el olvido'. Y aunque parezca inofensivo, el descuido tiene consecuencias: tono desigual, textura áspera, deshidratación, manchas y pérdida de firmeza. Todo por no extender el sérum unos centímetros más abajo o por olvidar el SPF en zonas tan expuestas como el escote o las orejas. Pero tranquila, no estás sola: según los expertos, la mayoría lo ignora por desconocimiento o miedo a mancharse el pelo. Spoiler: se puede evitar.
Cuello, escote y orejas: los grandes olvidados (que envejecen más rápido)
Estas zonas comparten una piel fina y delicada, mucho más propensa a la deshidratación y a la pérdida de elasticidad. ¿El motivo? Tienen menos glándulas sebáceas y suelen estar más expuestas al sol sin protección. 'En España, desde abril hasta noviembre, estas áreas están constantemente expuestas a la radiación UV', explica Mireia Fernández, directora dermocosmética de Perricone MD. ¿La consecuencia directa? Aparición de manchas solares, arrugas marcadas y un tono apagado. Marta Agustí, directora nutricional de Advanced Nutrition Programme, añade: 'Ahora que empieza el buen tiempo, es el momento de ser aún más conscientes de que esas áreas están igual o más expuestas que el rostro'.
La buena noticia es que no necesitas una rutina paralela: basta con integrar estos pasos en tu día a día. Patricia Garín, de Boutijour, insiste en la importancia de aplicar todos los cosméticos (sí, incluso los limpiadores) hasta el nacimiento del pelo, las orejas, el cuello y el escote. ¿Qué tipo de productos funcionan mejor? Los antioxidantes (como la vitamina C) y los retinoides son clave para prevenir y tratar los daños visibles, pero siempre acompañados de hidratación y, por supuesto, fotoprotección.
Brightening sprouts ecstasy, de Byoode (55 euros)

Un sérum iluminador con tres tipos de vitamina C y niacinamida ideal para igualar el tono y prevenir manchas en zonas propensas como el escote o el nacimiento del pelo. Perfecto para pieles mixtas o grasas.
Advanced day ultimate protect spf50, de Medik8 (79 euros)

Protección solar avanzada, invisible y antioxidante que no solo cuida del rostro, sino también de cuello y escote gracias a su textura ligera y su poder frente a la luz azul y la polución.
X-lifting mask, de Boutijour (52 euros)

Mascarilla reafirmante que redefine el óvalo facial y combate la flacidez del cuello y la papada con cafeína y Volufiline. Ideal como tratamiento flash antes de un evento o tras días de exceso de sol.
Retin-a night, de Byoode (75 euros)

Un potente sérum de noche con retinoides, péptidos, vitaminas y ácido hialurónico que reafirma y regenera sin irritar. Ideal para zonas que tienden al descolgamiento, como el cuello o la línea mandibular.
Cold plasma plus+ Sub-d/neck, de Perricone MD (162 euros)

El tratamiento estrella para combatir la pérdida de firmeza en el cuello y el escote. Contiene DMAE, péptidos y cafeína para redefinir y tensar los tejidos. Se aplica siempre de abajo hacia arriba.
Extender tus productos unos centímetros más, aplicar SPF en las orejas o elegir un sérum con activos reafirmantes para el cuello no te llevará más de dos minutos, pero sus efectos se notarán a largo plazo. Tu rutina facial necesita crecer contigo, literalmente, y abarcar todo eso que, hasta hoy, dabas por invisible. No te arrepentirás.
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