Política

Almería

Un juzgado anula la «delirante» disolución del departamento de latín en un instituto

Los jóvenes de un instituto almeriense se quedaron sin Departamento de Clásicas
Los jóvenes de un instituto almeriense se quedaron sin Departamento de Clásicaslarazon

Hay veces que la validación no llega. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 5 de Almería no se la ha dado a una decisión de la dirección del IES Campos de Níjar, perteneciente a la localidad de Campohermoso. El órgano judicial se ha alineado con la Asociación de Profesores de Institutos de Andalucía (APIA) y ha frenado la desaparición del Departamento de Clásicas –Latín y Griego– en ese instituto al revocar la «delirante», a juicio de la organización sindical, «modificación del proyecto educativo de ese centro almeriense impulsada por la entonces directora» del mismo, «en colaboración con el servicio de Inspección de la delegación territorial» de la Consejería de Educación de la Junta que, «apartándose del más elemental vestigio de profesionalidad acudió a socorrerla», según trasladaron ayer desde APIA.

El sindicato ubicó el arranque de la historia judicial en la postura de la directora de «hacer desaparecer al Departamento de Clásicas y, por añadidura, las horas dedicadas al desempeño de su jefatura». Luego, «cuando fue recurrido tal exabrupto ante la delegación territorial», añadieron, «intentó, deprisa y corriendo, proporcionarle una apariencia de legalidad» y «convocó, a posteriori, al claustro y al consejo escolar, a fin de que éstos sancionaran tan discutible medida». Y ello, a pesar de que «el consejo escolar carece de competencia alguna para aprobar los aspectos docentes del proyecto educativo de los institutos de educación secundaria». «Pero el esperpento siguió su curso –añadieron desde APIA– y la directora consiguió rizar el rizo, reuniendo a ambos órganos de gobierno, fuera del plazo establecido en la legislación para aprobar cualquier modificación del plan de centro», de nuevo, «con el asesoramiento del inspector de referencia», según el relato sindical, «para atribuirse allí mismo la exclusiva competencia para aprobar absolutamente todo». Ahora un juzgado les ha quitado la razón.