Política

Castilla y León

Aznar llama a fortalecer España en la presentación del libro «El futuro es hoy»

El ex presidente defiende la Constitución y asegura que en ella está la solución a los conflictos abiertos en nuestro país

Aznar junto a Carlos Aganzo y Fernando Conde, al término de la presentación
Aznar junto a Carlos Aganzo y Fernando Conde, al término de la presentaciónlarazon

El ex presidente del Gobierno y de la Junta de Castilla y león, José María Aznar, elegía el Teatro Zorrilla de Valladolid y el Aula Cultural de El Norte de Castilla para presentar su libro «El futuro es hoy» por vez primera desde que lo hiciera de forma oficial en Madrid hace unas semanas.

Ante un auditorio casi lleno, que le aplaudió con ganas en varias ocasiones, con numerosos miembros del PP de Valladolid y de Castilla y León presentes, como Jesús Julio Carnero o Alfonso Fernández Mañueco, el ex presidente contestaba sin complejos, fiel a su estilo y sin dejar indiferente a nadie, a todas las preguntas que le formulaban los periodistas Carlos Aganzo y Fernando Conde, sobre su visión del mundo, pero también y sobre todo, sobre lo que está ocurriendo en España.

Acerca de esto último, Aznar aseguraba que España vive el momento más delicado de los últimos 40 años, «con una crisis sistémica que se agrava día a día, donde no hay ninguna institución que no esté dañada y que no tiene una solución a corto plazo», decía, y por ello aseguraba que fortalecer la nación española y la Constitución es la tarea más importante que tiene por delante el país.

La Constitución es la solución

«Estoy cansado de oír y recibir insultos y desprecios a España todos los días», denunciaba Aznar, quien afirmaba, también, que el PSOE no es un socio de fiar para llevar a cabo esta misión y alertaba de que esta crisis sistémica «está impidiendo a España acometer otras cuestiones básicas como la Educación, las pensiones o la revolución digital.

En el año que cumple cuatro décadas, el ex presidente ponía en valor la Constitución, de la que decía que no es el problema sino la solución que tenemos para los conflictos abiertos, y aseguraba que gracias a ella, España vive sus años más prósperos. También cargaba contra la supuesta supremacía intelectual de la izquierda. Es de «encefalograma plano», decía, aunque avisaba a la derecha de su «tendencia insoportable a disfrazarse y a pedir perdón cuando no debe». Y en cuanto a su visión de la situación mundial, advertía de los peligros del mundo que no se ve, como es el ciberespacio, y avisaba de que la única alternativa al orden liberal que impera en el mundo es el caos, disfrazado de autoritarismo y populismo.