El desafío independentista

Societat Civil Catalana clama contra la «fractura social»

El presidente de la entidad, José Rosiñol, destaca que España es el «país más diverso de la UE», pero el «secesionismo nos acompleja»

El delegado del Gobierno en cataluña, Enric Millo, estuvo entre los asistentes al acto de Sociedad Civil Catalana
El delegado del Gobierno en cataluña, Enric Millo, estuvo entre los asistentes al acto de Sociedad Civil Catalanalarazon

La entidad Societat Civil Catalana (SCC) celebró ayer en el Auditori Palau de Congresos de Girona el acto «Diálogos para la convivencia: unidos en la diversidad».

La entidad Societat Civil Catalana (SCC) celebró ayer en el Auditori Palau de Congresos de Girona el acto «Diálogos para la convivencia: unidos en la diversidad». El debate, presentado por el periodista, Albert Castillón, contó con las intervenciones de las periodistas, Anna Grau y Anna Balletbò; el portavoz de Lliures, Roger Muntañola; el abogado Manuel Ibarz, y el presidente de la entidad, José Rosiñol. Todos realizaron un análisis exhaustivo sobre la situación que se está viviendo en Cataluña. Por su parte, el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, se encargó de clausurar el acto.

Todos los ponentes coincidieron en que la sociedad catalana está «más fracturada que nunca y que hace falta tomar medidas para solventar este gran problema cuanto antes».

Por ejemplo, Millo señaló que «en democracia nadie está por encima de la ley, si esto se acepta se recuperará la convivencia y la paz social en Cataluña». Añadió que «el respeto a la ley es la base de la democracia». No obstante, advirtió que «esto no será posible con los representantes actuales del secesionismo» porque ya han demostrado que son partidarios de actuar de forma «unilateral». Millo sostuvo que el futuro de todos los catalanes ha de pasar por «la formación de un gobierno plenamente legal, libre de causas penales y de delitos como la rebelión o la sedición».

Además, dejó claro que «el secesionismo rompió la lealtad institucional» y que debido a la crisis económica y a varios casos corrupción decidió impulsar un proceso rupturista cuya solución pasaba por «señalar al Estado como culpable» de la situación que se estaba viviendo y por «la celebración de un referéndum.

Por su parte, Rosiñol dijo que «si conseguimos reconstruir esta situación de fractura social, España puede convertirse en el país referente en la Unión Europea». El presidente de SCC añadió que «España tiene la característica de que es el país más diverso de la UE», y que el desafío secesionista «nos está acomplejando como país».

Además destacó que Europa consiguió formar una unión política «sin guerra, fue una unión de libertad, de ciudadanía, de Estado de derecho». Por tanto, aunque «lo que ocurre en este momento en Cataluña es una ola de populismo», aseguró a los ciudadanos de Girona que no están solos. «Tenéis la solidaridad de los catalanes constitucionalistas y del conjunto de los españoles», señaló.

La periodista Anna Grau explicó que «la fractura social es el resultado de un fracaso por parte del bloque secesionista». Añadió que lleva catorce años escuchando que es «una traidora» y que los traidores son los secesionistas porque «son ellos los que están actuando al margen de la ley».