Lotería de navidad

Lotería de Navidad

Carolina, la primera niña en cantar el Gordo: “el azar no me ha devuelto la suerte"

El sueño de Carolina

La niña que hizo historia en el tradicional sorteo de la Lotería de Navidad, se llama Carolina Pellico. Tiene el honor de ser la primera chica en cantar el premio gordo. Corría el año 1986. España había ingresado en la Comunidad Europea, Felipe González ganaba por segunda vez las elecciones, Mingote entraba en la RAE y el programa Buenos Días acompañaba por las mañanas a miles de españoles.

22/12/2019 Madrid. Sorteo de la lotería de Navidad. El gordo. Quinto premio.Cristina Bejarano.
22/12/2019 Madrid. Sorteo de la lotería de Navidad. El gordo. Quinto premio.Cristina Bejarano.Cristina BejaranoLa Razón

Aquel 22 de diciembre, con apenas trece años, una jovencísima Carolina cantaba el gordo de Navidad, para el número 03.772 que salió a las diez de la mañana. Dos años antes, en 1984, es una de las cinco niñas del Colegio de San Ildefonso que por primera vez participaron en el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. Ese año fueron las protagonistas al poner voz femenina al soniquete de la suerte. Incluso el diario ¡Ya! se venia arriba y recordaba así este hito en la historia de la emancipación femenina en España: “Si las mujeres pueden ir al espacio, también pueden cantar el gordo”.

Carolina saca la bola y se va cantando “veinticinco millooooones de peseeeeetas”. Al llegar a la mesa y enseñarlo, el presidente se percata de que es el Gordo y en ese mismo momento Carolina ve su error. El presidente se pone a cantar los doscientos cincuenta millones de pesetas y a Carolina se le corta la respiración al darse cuenta que no ha cantado el premio más importante del sorteo.

Ahora, treinta y tres años después, aún recuerda aquel momento que no olvidará nunca. "Estaba muy nerviosa, pero ya no podía hacer nada - cuenta a La Razón - No vi bien los números de la bola”. Carolina era una de las niñas internas de San Ildefonso y ese año era el último en el colegio. Entonces solo se cursaba hasta 8º de EGB y no quería despedirse de la institución sin dar el Gordo, el sueño de todos los niños de San Ildefonso.

Cuando ella frecuentaba el Colegio de San Ildefonso, la institución se dedicaba todavía a la tutela de niños y niñas sin familia. “Había unos sin un progenitor y otros a los que les faltaban ambos, pero ahí éramos como todos hermanos. Eso permitió que cuando las niñas empezamos a participar al sorteo no surgieran celos entre nosotros. Al revés, los chicos estaban encantados de ver a las niñas”, recuerda Carolina entre recortes de periódicos y fotos de aquella histórica jornada.

Sin embargo el azar no le ha devuelto la suerte. “Siempre compro la lotería pero nunca me ha tocado un premio grande. Sí que le tocó a un amigo cercano”, dice y se despide volviendo a cantar el número de la fortuna de este año, el número de su boleto: “ochentaynuevemilochocientosetentaynueve”.