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Banca

Cómo pasar tu hipoteca variable a fija para no pagar de más si el euríbor sigue subiendo

Il índice de referencia para calcular el tipo aplicado sobre estos préstamos, que va camino de situarse en valores positivos por primera vez desde 2016

Cómo pasar tu hipoteca variable a fija para no pagar de más si el euríbor sigue subiendo
Cómo pasar tu hipoteca variable a fija para no pagar de más si el euríbor sigue subiendolarazon

Los que tienen una hipoteca variable deben prepararse para asumir unas cuotas más altas en cuanto se actualice su interés. El culpable de este encarecimiento no es otro que el euríbor, el índice de referencia para calcular el tipo aplicado sobre estos préstamos, que va camino de situarse en valores positivos por primera vez desde 2016. Para hacerse una idea, basta decir que una hipoteca media de 150.000 euros a 25 años, con un interés de euríbor más 1%, costará 198 euros más al año si se actualiza su tipo con el euríbor de marzo (-0,237%).

Ante este escenario ciertamente preocupante, no son pocos los que se plantean pasar su hipoteca variable al tipo fijo para evitar que sus cuotas se encarezcan por la subida del euríbor. Surge entonces la duda de qué operación es más rentable para formalizar este cambio: llegar a un pacto con el banco, realizar una subrogación del préstamo o contratar un crédito nuevo. Según el comparador financiero HelpMyCash.com, lo aconsejable es explorar todas estas opciones para valorar cuál merece más la pena.

Habla primero con tu banco

Lo primero que hay que hacer, a juicio de los analistas de este comparador, es hablar con el banco con el que se tiene la hipoteca y solicitar el cambio. La entidad tiene derecho a rechazar esa petición, pero si la acepta, estudiará el perfil del cliente y le comunicará qué interés fijo estaría dispuesto a aplicar en sustitución de su actual tipo variable.

Si el cliente está conforme con el nuevo interés, podrá llevar a cabo una operación conocida como novación, que consiste en modificar las condiciones originales de la hipoteca. El proceso es el siguiente: se tasa la vivienda para que el banco conozca su valor, este emite una oferta oficial con el nuevo tipo fijo que se aplicará y se formaliza el cambio ante notario. El hipotecado tiene que pagar el coste de la tasación (unos 300 euros) y la comisión asociada al paso al tipo fijo, cuyo precio no puede ser de más del 0,15% sobre el importe pendiente.

Contacta también con otras entidades

Formalizar una novación no es la única manera de pasarse del tipo variable al fijo. Según HelpMyCash, el cliente también puede cambiar su préstamo a otra entidad para llevar a cabo esa misma modificación. Por ello, desde este comparador recomiendan acudir también a otras entidades y preguntar si estarían dispuestas a mejorar la propuesta inicial del banco en el que se tiene la hipoteca.

Este cambio de banco suele llevarse a cabo mediante una operación llamada subrogación de acreedor, con la que se traspasa la hipoteca a una nueva entidad a cambio de que esta modifique sus condiciones (como pasarla del tipo variable al fijo). Lo que debe hacer el cliente es encontrar a un banco dispuesto a formalizar el traslado, luego tasar la vivienda, y finalmente, firmar el cambio ante notario. Su coste es el mismo que el de una novación: hay que pagar la tasación (unos 300 euros) y una comisión de no más del 0,15% sobre el importe pendiente.

Hay bancos, sin embargo, que prefieren otro método: que el cliente contrate una de sus hipotecas, en este caso a tipo fijo, y que use el dinero para liquidar su actual préstamo a tipo variable. En este caso, el hipotecado debe pedir una nueva hipoteca y cancelar su crédito con el dinero que le presten. Por estos trámites tendrá que pagar el precio de la tasación de la vivienda (300 euros), los gastos asociados a la cancelación registral de su hipoteca variable (unos 1.000 euros) y la comisión de amortización anticipada que tuviera este préstamo, cuyo coste puede ser de hasta el 2% sobre su importe pendiente.

Compara ofertas y elige la mejor

Una vez reunidas varias propuestas (de novación, de subrogación o de hipotecas nuevas), el cliente debe compararlas para valorar con cuál disfrutaría de un interés fijo más bajo. También es aconsejable que hable de nuevo con los bancos contactados, ya que es posible que alguno mejore su oferta inicial para superar a sus competidores.

Según HelpMyCash, no conviene alargar este proceso más de la cuentaporquelos bancos están encareciendo sus tipos fijos para promover la contratación de los tipos variables, con los que esperan obtener mayor rentabilidad si el euríbor sigue subiendo. Por lo tanto, conviene iniciar los trámites cuanto antes y aprovecharse de los intereses competitivos de hasta 1,70% que todavía ofrecen muchas entidades, un porcentaje muy por debajo de los que se aplicaban antes de 2020.

Entre los bancos que ofrecen tipos fijos inferiores a ese porcentaje, está, por ejemplo, Liberbank (desde el 1,50%) o BBVA (desde el 1,60%), aunque hay otros que pueden mejorar estas propuestas si el cliente tiene un buen perfil y sabe negociar. Lo aconsejable, por lo tanto, es acudir a tantas entidades como sea posible para aumentar las probabilidades de hacerse con un buen interés. En la página web de HelpMyCash se puede consultar qué bancos están dispuestos a aceptar estas operaciones.

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