Reincidentes

El matrimonio chino de Fuenlabrada de los 10.000 disfraces de superhéroes falsos

La Policía Nacional los considera responsables de unas pérdidas al fabricante original de más de 200.000 euros

La Policía requisa más de 10.000 máscaras y disfraces de superhéroes y detiene a un matrimonio chino reincidente
La Policía requisa más de 10.000 máscaras y disfraces de superhéroes y detiene a un matrimonio chino reincidentePOLICÍA NACIONALPOLICÍA NACIONAL

Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos personas de nacionalidad china como presuntos autores de un delito contra la propiedad industrial por comercializar 10.000 falsificaciones de caretas, disfraces y complementos de héroes infantiles de reconocidas marcas que se encontraban en dos locales en los municipios madrileños de Fuenlabrada y Humanes, ha informado la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

La investigación comenzó a finales del pasado año a raíz de la denuncia presentada por parte del representante de una conocida compañía en la que comunicó a los agentes la venta ilegal de artículos que vulneraban los derechos de propiedad industrial de su marca. La comercialización de estas imitaciones provocó un importante perjuicio económico así como un gran desprestigio.

Entonces, los agentes establecieron un dispositivo policial para detectar la venta de estos artículos falsificados, comprobando que en dos locales se vendían y almacenaban efectos falsificados. Una vez identificados los responsables, los investigadores realizaron una inspección en un establecimiento en Fuenlabrada y en un almacén de 5.000 metros cuadrados en Humanes.

Allí encontraron más de 10.000 artículos falsificados que vulneraban los derechos de propiedad industrial de importantes firmas y marcas infantiles, quedando precintados en 19 palés a disposición de la autoridad judicial.

Provocaron pérdidas de más de 200.000 euros

En dichos establecimientos se encontraban máscaras y elementos de disfraz que reproducían superhéroes y personajes de películas infantiles, registrados por las entidades gestoras, las cuales no habían prestado consentimiento para su reproducción.

Además no reunían los estándares de calidad que la marca exigía en sus propios productos, provocando perdidas que podrían superar los 200.000 euros.

La operación culminó con la detención de un matrimonio de nacionalidad china a los que se le imputa un delito contra la propiedad industrial. Uno de los arrestados ya había sido detenido en anteriores ocasiones por idénticos hechos.