Nevadas de enero

El Ayuntamiento plantará 100.000 árboles nuevos en Madrid

Almeida presenta su plan de acción para la recuperación del patrimonio verde tras «Filomena»: el 10% de los 800.000 ejemplares afectados cayeron o serán talados

José Luis Martínez-Almeida visitando la Casa de Campo, donde borrasca «Filomena» fue más devastadora.
José Luis Martínez-Almeida visitando la Casa de Campo, donde borrasca «Filomena» fue más devastadora.Alberto OrtegaEuropa Press

Ha pasado medio año y la huella de «Filomena» aún se deja ver en el vacío de los 20.000 alcorques que, a su paso, o, mejor, con su partida tras el deshielo, quedaron desnudos de vida. Pero no fueron los únicos: la borrasca que inaugurando el 2021 cubrió de blanco la capital causó daños en un total de 800.000 árboles de la ciudad, esto es, el 46% de su patrimonio de 1,74 millones de ejemplares de más de 500 especies distintas repartidos por 5.000 calles y 6.000 hectáreas de zonas verdes. Y aunque la mayoría se salvaron, 80.000 de ellos acabaron cayendo, o bien han tenido o tendrán que ser talados por su mal estado. Pero, seis meses después, cuando la ciudad luce ya 51.300 árboles nuevos, José Luis Martínez-Almeida ha anunciado que a estos les acompañarán otros 100.000 ejemplares gracias a la que será la mayor plantación de arbolado de la historia de Madrid.

Así lo ha anunciado el 19 de julio el alcalde junto al delegado de Medio Ambiente Borja Carabante después de visitar la Casa de Campo, donde las enormes nevadas de enero fueron más devastadoras, con 60.000 ejemplares perdidos, y, en consecuencia, donde los servicios técnicos municipales llevan desde entonces realizando labores de limpieza, poda y desbroce que tendrán que continuar desarrollando como mínimo hasta noviembre.

Con este escenario de fondo, el regidor madrileño ha presentado el nuevo plan de recuperación del arbolado del Ayuntamiento, un decálogo de actuaciones que resultan de las recomendaciones de un consejo asesor que viene trabajando en ello desde el pasado mes de abril ha plasmado en un informe final que el Consistorio toma ahora como guía científica en el abordaje de la recuperación y el enriquecimiento del patrimonio verde de la capital. Así, el plan recién presentado incluye importantes medidas que van más allá de la plantación de esos100.000 árboles nuevos.

Por ejemplo, Madrid contará a raíz de este plan con una nueva herramienta informática de apoyo a la toma de decisiones en la selección de las especies a la hora de replantar, pues, según han recogido en su texto los expertos del Consejo Asesor del Arbolado, para hacerlo correctamente, hay que tener en cuenta hasta una veintena de variables, que van desde las dimensiones del árbol y el tipo de suelo hasta criterios económicos y culturales.

En este sentido y en contra de lo que sugirieron algunas voces al principio, los profesionales descartan dejar de plantar pinos y cipreses, que han resultado ser las especies más afectadas por «Filomena». Su argumento recogido en el documento citado por el alcalde es que estos ejemplares durante todo el año captan contaminantes, secuestran dióxido de carbono, regulan térmicamente la ciudad y, además, ofrecen cobijo a la fauna y microfauna. El consejo asesor apuesta también por no centrarse solo en especies autóctonas en la reforestación.

Otra nueva medida con la que se compromete el Ayuntamiento es con la de promover una mayor conectividad ecológica para que todas las zonas verdes que tengan más de cinco hectáreas de superficie estén como mínimo unidas con otra de al menos igual tamaño, una iniciativa que minimizará el aislamiento de las especies y que, a su vez, equilibrará el reparto del patrimonio verde en la capital, poniendo especial atención en el interior de la M-30, para que, como ha dicho el alcalde, «nadie tenga que disponer de una zona verde a más de diez minutos de su casa». En esta misma línea, las nuevas plantaciones que se ejecuten contarán con un arbolado de mayor diámetro que hasta ahora para aumentar los servicios ecosistémicos y mejorar la imagen del viario.

Por otro lado, el alcalde ha informado de que el actual protocolo de actuación ante situaciones adversas que se aplica en El Retiro se extenderá al resto de parques históricos, lo que permitirá realizar labores de inspección más exhaustivas tras producirse fenómenos climatológicos extremos, como lo fue «Filomena», pero como lo son igualmente las fuertes rachas de viento o las sequías por altas temperaturas.

Llama la atención también que la nueva guía científica del Ayuntamiento en estos términos incorpora la variable de la jardinería histórica, en referencia a la necesidad de hacer un estudio más profundo sobre las características de las plantaciones de la capital, extrayendo conclusiones que contribuyan a conservar los valores estéticos y sociales que configuran el paisaje urbano de la ciudad. Y, por último, el Consejo Asesor del Arbolado señala la importancia de dar a conocer el papel clave del arbolado en el desarrollo económico y social de la que es la casa de los madrileños y madrileños.

Desde el más profundo agradecimiento al trabajo del consejo experto y a los funcionarios que siguen haciendo por eliminar las últimas señas de una nevada que es difícil de olvidar incluso cuando los termómetros rozan los 40 grados, José Luis Martínez Almeida se reafirma en que Madrid quiere seguir siendo una de las ciudades con más árboles de Europa y, para eso, dice, este plan de actuación del Ayuntamiento para paliar los daños que acarreó «Filomena» debe convertirse seguidamente en un proyecto ciudadano para el cuidado de los nuevos y de los viejos árboles, un trabajo que hacer «entre todos y con un esfuerzo colectivo». Y que la mayor plantación de árboles de Madrid siga haciendo eso, historia.