Gastronomía

Raro blanc canario

Hasta su presentación cromática tiene esa belleza turbia que nos enamora de vinos radicalmente gastronómicos

La Bota de Mateo 2019. Bodega Los Loros
La Bota de Mateo 2019. Bodega Los Loroslarazon

La verdad es que lo no raro, no interesa. Alguien incluso puede sostener que en el vino, cada viñedo, cada enólogo, cada visionario de este planeta lleva la originalidad y la heterodoxia por bandera. Esta diatriba viene a cuento de un blanco canario de pura expresión de la listán blanco, que intenta borrar huellas, y aliarse con los rumores de la Baja Andalucía y del infalible Marco jerezano. El bodeguero Juanfran Fariña conoce esta especial variedad aclimatada a una gran altitud, sobre un suelo arcilloso, y con un viñedo de pie franco bastante viejo.

Y para la profundidad lírica del vino, ha buscado dos botas de manzanilla para que le aporten ese especial toque de salinidad, de cuerpo, para ir leyendo y desleyendo según añadas, la intensa propuesta de este blanco tinerfeño. Y la crianza en principio biológica que tiñe las botas, también evoluciona y oxida, y le da esa longitud gustosa a este vino. Hasta su presentación cromática tiene esa belleza turbia que nos enamora de vinos radicalmente gastronómicos. Fruta por derecho, volumen por destino, y vida por delante de un ejemplar que está marcado por su originalidad. La mejor suerte del vino especial hoy indudablemente viene de Canarias.