Boadilla acusa a Alcorcón de “chupar” de su energía eléctrica

Boadilla del Monte ha dicho «basta». Tal y como ha venido denunciando el Ayuntamiento madrileño, sus homólogos de Alcorcón están utilizando la energía eléctrica de sus dominios para utilizarlo dentro de sus límites. Una práctica que ha llevado al alcalde de Boadilla, Javier Úbeda (PP), a exigir por carta a la alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés, que ponga fin a esta situación.

Según denuncia el Consistorio madrileño, los puntos en conflicto se encuentran en la urbanización Montepríncipe, y al centro educativo CEU. Todos ellos lugares que pertenecen al municipio de Alcorcón. Sin embargo, todos ellos también conectados a los centros de mando de Boadilla.

Desde el equipo de Gobierno recuerdan que el incremento del coste de la energía eléctrica a causa de la guerra en Ucrania supondrá para Boadilla multiplicar por tres el gasto (de dos a seis millones de euros anuales) de este suministro, al haber tenido que formalizar un nuevo contrato en las últimas fechas. Un hecho que ha llevado al Consistorio boadillense a «realizar una auditoría del alumbrado viario en todo el municipio para ahorrar al máximo en aquellos puntos en los que sea posible», tal y como recuerda el alcalde de Boadilla en su misiva a Natalia de Andrés.

«En este estudio se ha podido constatar», indica Javier Úbeda, que una de las zonas de la urbanización Montepríncipe que pertenece a Alcorcón sigue teniendo su alumbrado conectado de forma indebida a dos centros de mando de Boadilla. Una circunstancia de la que ambos ayuntamientos ya tuvieron conocimiento cuando Boadilla renovó en 2020 el alumbrado de la citada urbanización, instalando casi 600 luminarias LED para alumbrar mejor las calles del municipio y seguir ahorrando recursos a los vecinos.

Hasta la fecha, y a pesar de haber pasado ya casi dos años, «Alcorcón no ha expresado voluntad alguna de resolver esta situación». Motivo que llevado al alcalde de Boadilla del Monte a solicitar a la alcaldesa de Alcorcón «una actuación urgente ya que, al afectar a vecinos y al centro educativo, Boadilla no ha desenganchado estos puntos aún».

«No tenemos intención alguna de perjudicar a los vecinos de Alcorcón, pero consideramos que esta circunstancia no puede seguir manteniéndose por más tiempo. Cada Ayuntamiento tiene que asumir los costes de sus obligaciones; y el alumbrado público supone un gasto muy elevado. Estoy seguro de que Alcorcón, que finalizó 2021 con un superávit de 33 millones de euros, frente a los casi 8 millones de euros de Boadilla, puede perfectamente asumir el coste que suponen estas conexiones», señala el alcalde de en su carta.

Por último, Úbeda pone a disposición del Ayuntamiento de Alcorcón el trabajo de los servicios técnicos de Boadilla para revertir la actual situación.