La unión de dos conceptos en una sola carrocería

¿Pueden viajar sin apreturas cinco personas adultas en un automóvil con formas de coupé?. La respuesta es afirmativa si lo hacemos en el nuevo Grand Coupé de la serie 4 de BMW. Un automóvil que combina el diseño con la deportividad y que, como todos los modelos de la marca muniquesa, está repleto de la tecnología más avanzada. Ofrece una amplia gama de motores con potencias de hasta 374 caballos en la versión M-Performance, y ya está a la venta en diferentes versiones desde 50.500 euros y con un plazo de entrega de tres meses.

La serie 4 de la marca alemana ha sido un éxito desde su lanzamiento. Estamos ahora ante la segunda generación de esta serie que ha conseguido hasta ahora unas ventas superiores a las ochocientas mil unidades, de las cuales más de quince mil se han matriculado en nuestro país. Esta serie 4 tiene tres variantes y, como anécdota del mercado, el 18% de las ventas han sido en las versiones descapotables, el 26% son coupés y el 56% restante corresponde a las carrocerías Grand Coupé de cuatro puertas.

No es extraña esta aceptación de la clientela teniendo en cuenta el equilibrio que se ha conseguido entre el precio y la tecnología a la que podemos acceder, todo dentro de una carrocería de diseño muy acertado. En ella destaca un frontal dominado por la parrilla formada por los dos grandes radiadores en forma de riñón, cuyas láminas se abren o cierran en función de las necesidades de aireación de la mecánica. Completa la vista delantera los faros estilizados con tecnología leed y dos grandes entradas de aire en la parte baja de los extremos hechas para refrigerar diferentes elementos mecánicos, especialmente los frenos. Una imagen espectacular que se completa con la vista lateral, favorecida por detalles como las puertas sin marcos o sus abridores enrasados con la línea de la carrocería o las llantas de diseño de hasta 18 pulgadas de medida. En la vista posterior son destacables, además de unos faros estilizados, el conjunto del difusor y los escapes.

El interior no desmerece de lo que hemos visto por fuera. Asientos deportivos regulables por motores eléctricos, volante multifunción, botón de arranque central junto a la palanca del cambio… y todo con el buen gusto que siempre suelen tener las terminaciones de BMW, donde la calidad de los materiales y el ajuste perfecto de todos los elementos son una norma. Cuando apretamos el motor de arranque nos sorprende la presencia de dos grandes pantallas que reúnen a todas las funciones. Frente al conductor, un llamado “cockpit virtual” nos proporciona toda la información necesaria sobre el comportamiento del motor y todos sus complementos, parte de los cuales se reflejan asimismo en el parabrisas. En posición central del salpicadero, otra pantalla de grandes dimensiones incluye todas las informaciones tanto de entretenimiento como de funcionamiento de sistemas de seguridad activa, navegación, sonido, conexiones externas, etc…

Como cabía esperar, este Grand Coupé viene equipado con todos los sistemas de ayudas a la conducción, ya que puede tener incluso la función de conducción autónoma. Destaca el control de crucero activo con asistente de límite de velocidad, el asistente de dirección y guiado de carril, el aviso de colisión frontal, información del límite de velocidad, control de distancia de aparcamiento, cámara de visión trasera y el asistente de aparcamiento con asistente de marcha atrás, etc…

A pesar de su línea estilizada, las dimensiones de este Grand Coupé son las de una gran berlina, ya que mide 4,78 metros de largo por 1,85 de ancho y 1,442 de altura, con lo que ha ganado ligeramente dimensiones respecto a la versión inicial. Su distancia entre ejes de 2,85 metros permite una habitabilidad excepcional, ya que pueden viajar sin problemas de espacio cinco personas adultas y disponer de un buen espacio para equipajes, como lo acreditan los 470 litros del maletero que, cuando abatimos los respaldos de los asientos posteriores en su conjunto o separadamente, puede ir aumentando el volumen hasta llegar a los 1.290 litros en el caso más favorable.

Por lo que se refiere a la mecánica, BMW ofrece varias alternativas en gasolina y diésel e incluyo ya anuncia una versión electrificada para el año próximo, con una autonomía de hasta 600 kilómetros. Pero lo que ya está en los concesionarios son tres versiones de gasolina, las dos primeras con motores de dos litros y cuatro cilindros que dan potencias de 184 o 258 caballos, desde 51.600 euros, y la denominada Performance que, por75.900 euros ya se asciende a un motor de seis cilindros y tres litros cuya potencia ya asciende a los 374cv y que se complementa con un cambio automático y con levas en el volante de ocho velocidades. La versión más asequible es el diésel dos litros y 190cv. que está a la venta desde 50.550 euros.