Castor Díaz Barrado. 31/10/2017
No se puede decir que las relaciones entre Rusia y la Unión Europea pasen por su mejor momento. Tampoco se puede decir que se vislumbren nuevas e intensas relaciones entre Moscú y Bruselas. Las discrepancias son muchas y no sólo afectan a cuestiones puramente internas de las dos partes sino que, también, se plasman en las posiciones tan distantes que mantienen en materia de política exterior. Parece...