Fútbol

Fútbol

La niebla

La Razón
La RazónLa Razón

«¡Ay!, mi querido Zidane. Tenemos un problema», reconoce el perspicaz Sherlock al entrenador del Madrid, en ausencia de Watson. Zizou le devuelve una mirada traviesa, ensancharía esa sonrisa franca que le caracteriza y le pregunta: «¿Tú también con esa monserga de Bale o Isco?», mientras cae la niebla sobre los muelles de Cardiff. Consumen las horas que faltan hasta las 20:45 del sábado entre cábalas. El agudo Holmes no es partidario de cambiar lo que funciona. Le recuerda que se precipitó al alinear al galés contra el Barcelona. A la media hora pidió el cambio. Roto de nuevo. Aquello fue el Día de Sant Jordi. Desde entonces no ha jugado. ¿Seguro que está recuperado? El artista dice que sí, quiere jugar en su ambiente, ante sus paisanos, que le idolatran. Los galenos no dicen que no. El parte médico es favorable. ¿Es conveniente recuperar la BBC? La decisión es complicada. «¿Vas a dejar en el banquillo al segundo jugador más caro de la historia?». «No es el dinero, Sherlock, es la calidad del futbolista, su fuerza, su motivación, su velocidad, su categoría...». «Isco te proporciona equilibrio, alternativas en el juego, ¿y Bale?». «Bale impone, es el relámpago y el rayo, intimida...». ¿Entonces, quién va a jugar? Zizou vuelve a sonreír, «hasta el sábado no lo sabrás, por mucho que investigues y por más vueltas que le des».

Una duda no es un problema. El suspense se apodera de la Champions hasta una hora antes del partido. En «La apuesta del año», Loterías y la AEPD (Asociación Española de la Prensa Deportiva) tardaron 38 jornadas en elegir a Iñaki Williams jugador revelación de la temporada. Toda una Liga. Paciencia, pues.