La situación

Comisiones de investigación

«El objetivo no es la verdad, sino confirmar las presunciones propias y vapulear al adversario político»

Hay citas cuya autoría es difícil de establecer y que han pasado de boca en boca a lo largo de los años. Una, especialmente acertada, es aquella según la cual, si el objetivo es resolver un problema, lo mejor que se puede hacer es designar a un responsable; pero si la intención es que el problema se alargue en el tiempo, se debe crear una comisión.

La frase ha sido tan utilizada a lo largo de la historia que llegó a ser atribuida en España a Romanones; en Argentina, a Perón; en el Reino Unido, cómo no, a Churchill; y en Francia, a Napoleón.

En España no hay comisión que mejor cuadre con el objetivo de no resolver nada que aquella que se crea en el parlamento para investigar algún caso de corrupción o cualquier modalidad de escándalo político. Esta semana se conforman dos comisiones de investigación. Una, en el Congreso, para estudiar la compra de material sanitario durante la pandemia por parte de todas las administraciones públicas. Y como el PSOE pretende esconder el caso Koldo ampliando la investigación a las comunidades y ayuntamientos gobernados por el PP, los populares crean su propia comisión solo sobre el caso Koldo en el Senado, donde disponen de mayoría absoluta. Pero pierdan toda esperanza de sacar algo en claro.

Estas dos comisiones se unen a otras tres que se crearon en el Congreso por impulso de los socios independentistas de Pedro Sánchez sobre la conocida como Operación Cataluña, sobre el espionaje con Pegasus y sobre el atentado yihadista de 2017 en Cataluña. Con toda seguridad, el ruido nos ensordecerá tanto que será difícil percatarse de las nueces, si las hubiera.

La experiencia nos dicta que en anteriores comisiones de investigación cada partido ha acudido con sus conclusiones prefijadas, antes de escuchar a los comparecientes. Y es así porque el objetivo no es la verdad, sino confirmar las presunciones propias y vapulear al adversario político.

Pretender que los partidos participan en estas comisiones con buena intención es de una ingenuidad conmovedora. Nada positivo saldrá de estas investigaciones parlamentarias que no consiga, con mayor eficiencia, una investigación judicial.