El Trípode del lunes

La «Primavera árabe» triunfa en Siria

Es preciso tener presentes estos acontecimientos para entender lo sucedido en Siria donde se ha precipitado en 11 días la caída del régimen de Al Asad que ayer huyó del país

El 17 de diciembre de 2010, comenzaron en Túnez unos altercados que posteriormente se extenderían a diversos países árabes de la región en forma de manifestaciones, levantamientos populares y alzamientos militares, dando lugar a la conocida como «Primavera Árabe». Su denominación responde a haber sido considerados esos acontecimientos como un deseo de derrocar a gobiernos unipersonales y dictatoriales, y sustituirlos por regímenes pluralistas y democráticos, objetivo no siempre alcanzado en los países donde triunfaría total o parcialmente. En Túnez, donde nació tras la inmolación «a lo bonzo» de un joven dependiente ambulante que iba a ser detenido, tuvo éxito y su presidente Ben Ali, fue apartado del poder en enero de 2011. De allí se extendió a Siria, Libia, Egipto, Líbano, Argelia, Jordania, Omán, Yemen, etc… terminando, con alguna excepción, en 2012. En Egipto, el presidente Hosni Mubarak acabó dimitiendo, mientras en Libia, el conocido dictador Gadaffi fue también derrocado y muerto cuando huía por el desierto tras un bombardeo de la aviación francesa bajo bandera de la OTAN. Asimismo, el PM de Jordania fue destituido, mientras en otros países se promovieron reformas políticas liberalizadoras. El caso más singular y grave fue el iniciado en Siria, donde los rebeldes se enfrentaron al régimen de Bashar Al Asad heredero de su padre e instaurador de la dictadura del partido socialista árabe Baaz que llevaba (actualmente) ya más de 50 años en el poder, y que acaba de ser derrocado tras una guerra civil que comenzó en 2011 al calor de esa referida Primavera. Es preciso tener presentes estos acontecimientos para entender lo sucedido en Siria donde se ha precipitado en 11 días la caída del régimen de Al Asad que ayer huyó del país. Es cierto que en esos días ha caído Alepo, la segunda ciudad más importante del país y Homs a continuación, para finalmente Damasco caer ayer en manos de los rebeldes. Pero la rebelión contra su régimen como decimos comenzó en 2011, resistiendo Al Asad gracias al apoyo de Rusia, Irán y su principal organización terrorista Hizbulá. La guerra en Ucrania por parte de Rusia y la de Irán y Hizbulá con Israel, les ha debilitado y le han retirado su apoyo precipitando su caída. Trump se ha manifestado distanciado de la situación en Siria, mientras Netanyahu ha celebrado el debilitamiento de Irán aunque ha tomado posiciones en los Altos del Golán, estratégica zona devuelta a Siria en 1974 tras la guerra del Yom Kippur de 1973, y ocupada por Israel en la Guerra de «los Seis Días» de junio de 1967. Turquía (OTAN) con Erdogan, apoya a los rebeldes y sale fortalecida en la región.