El trípode

La vengativa “memoria frentepopuista” 

Un pueblo que olvida su Historia está condenado a repetirla. Y el actual Frente Popular actúa deseando vengar la suya de 1936

No son pocos quienes todavía dudan o se niegan a aceptar que el sanchismo actualmente en el poder es un virtual Frente Popular sucesor del de 1936, el primero y hasta ahora único en la Historia de España. Para acreditarlo basta comprobar que es una coalición social comunista, la primera en el gobierno desde 1978, y con una agenda política que vino de la mano del gobierno socialista formado tras el 11 M, y que el actual desea llevar a su culminación. Es preciso rememorar lo sucedido entonces para comprobarlo, cuando aquel terrible atentado terrorista, tres días antes de las elecciones generales del domingo 14 de marzo, provocó un vuelco electoral que llevó al Gobierno a un PSOE al que todas las encuestas daban como claro derrotado hasta ese momento. De allí surgieron el “matrimonio” homosexual, la promoción del aborto y la memoria histórica, entre otras iniciativas que prácticamente no habían estado presentes en la campaña electoral, lo que apunta a una relación “causa- efecto” con lo sucedido el 11 M. Ahora solo les faltaba acometer contra Franco, considerado el enemigo número 1 por los frente populistas y muy especialmente de quienes están detrás de ellos “en la sombra”. Ya exhumaron sus restos hace seis años de la Basílica Pontificia del Valle de los Caídos y ahora quieren enterrar su memoria de la Historia. Y se atreven a decir que es por “respeto a sus víctimas” para conmemorar el 50º aniversario de su fallecimiento; quienes no respetan a las víctimas del terrorismo etarra, que son ahora socios suyos. Los “progresistas” sanchistas solo engañan a los que están dispuestos a dejarse engañar en cuanto a su concepto de la democracia parlamentaria, que están degradando a pasos agigantados. De hecho ya hace un tiempo su líder supremo expresó ante el Comité Federal de “su” PSOE que estaba dispuesto a seguir en el gobierno “sin contar con el poder legislativo”, lo que ya es una patética realidad en estos momentos. Su objetivo último y cada vez más explícito -para quien quiera ver- es conseguir una Tercera República para lo cual la Monarquía representada por la Casa de Borbón es su obstáculo principal. Por ello han estigmatizado a D. Juan Carlos, cuya actuación fue decisiva para conseguir una Transición pacífica presidida por un espíritu de consenso y reconciliación entre los representantes del franquismo y sus opositores. Dentro de tres semanas será el 50º aniversario de su proclamación como Rey de España y es lamentable el injusto tratamiento que se le está dispensando. Un pueblo que olvida su Historia está condenado a repetirla. Y el actual Frente Popular actúa deseando vengar la suya de 1936.